El fundador de la secta Verdad Suprema, Shoko Asahara, considerado el cerebro de los mortales ataques con gas sarín en el metro de Tokio en 1995, fue ejecutado hoy en la horca, según informó la cadena pública NHK.
El carismático gurú de 63 años, cuyo nombre real era Chizuo Matsumoto, ha sido ejecutado hoy junto a 13 miembros de la secta condenados a pena de muerte por un atentado que costó la vida a 13 personas y dejó a decenas en estado casi vegetativo.
El gurú se encontraba en el corredor de la muerte desde 2004. El ataque de su secta dejó además a unos 6,300 heridos.
Arrestado en mayo de 1995, siempre negó haber cometido algún delito a pesar de las declaraciones de sus antiguos seguidores que lo implicaban.
Ciego del ojo izquierdo por un glaucoma juvenil y famoso por su larga barba, sus coloridas túnicas y su Rolls-Royce, el líder predicaba el advenimiento de una guerra de proporciones apocalípticas de la que surgiría una raza de super-humanos, que serían sus seguidores.
LO MISMO DEVER HACER EN EL SALVADOR EJECUTAR ASESINOS, PANDILLEROS, CRIMINALES
Tengo entendido que Japón es un país bien civilizado y cuando un idiota y sus seguidores atentan contra la integridad del pueblo lo hacen fiambre como a éste loco, ¿porqué en El Salvador país tercemundista se consienten tanto a los marosos y sus líderes, en vez de ejecutarlos?