El Departamento de Defensa de Estados Unidos ordenó este sábado el envío de alrededor de 3.000 soldados adicionales a la frontera suroeste del país para hacer cumplir con la decisión del presidente estadounidense Donald Trump de desplegar fuerzas de combate para contener la inmigración.
“Como lo decretó el presidente Trump, el secretario de Defensa Pete Hegseth ha ordenado el despliegue de un Equipo de Combate de la Brigada Stryker (SBCT) y un Batallón de Aviación de Apoyo General para reforzar y expandir las operaciones de seguridad fronteriza”, informó el Pentágono en un comunicado. Los Strykers son vehículos blindados de transporte de tropas sobre ruedas.
“El Departamento de Defensa sigue colaborando con el Departamento de Seguridad Nacional para colmar las lagunas de capacidades críticas en la frontera sur”, señaló un comunicado militar
Un oficial, que habló bajo condición de anonimato con la agencia Reuters, dijo que las tropas irían a Fort Huachuca en Arizona.
Los refuerzos llegarán en las próximas semanas y su despliegue a lo largo de los casi 3.000 kilómetros de frontera subraya el objetivo de la actual Administración Trump de “mantener la soberanía, la integridad territorial y la seguridad de los Estados Unidos”, según el Departamento de Defensa.
Junto con los 1.100 soldados de apoyo del Comando Norte del ejército anunciados el viernes, entre otros, los refuerzos anunciados el sábado elevarían el número total de tropas en servicio activo en la frontera a aproximadamente 9.000 efectivos, según The Washington Post.
Esta será la segunda oleada importante de tropas en servicio activo enviadas para reforzar la frontera desde que Trump fuera investido el pasado 20 de enero.
Esta decisión reafirma la apuesta de Trump por romper con prácticas de anteriores presidentes, que reducían los despliegues a un número más limitado de efectivos o incluían a reservistas en servicio activo, incluso en un momento de relativa calma en la frontera.
El jueves, Seguridad Nacional dijo que el número de migrantes capturados cruzando ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México en febrero está en camino de estar en o cerca de un mínimo mensual récord.
Trump ha recurrido cada vez más al Ejército, incluyendo el envío de tropas adicionales a la frontera, el uso de aviones militares para sacar a los migrantes de Estados Unidos y la apertura de bases militares para ayudar a alojarlos.
El personal militar ha sido enviado a la frontera casi continuamente desde la década de 1990 para ayudar a hacer frente a la migración ilegal, el tráfico de drogas y la delincuencia transnacional.