El Atlético de Madrid comienza con buen píe su temporada de la defensa del título. Los rojiblancos, vigentes campeones de Liga, vencieron en la primera jornada al Celta en Balaídos gracias a los goles de Correa, ante el tanto marcado por Iago Aspas.
Simeone colocó un once de circunstancias debido a la falta de ritmo de algunos jugadores importantes como Luis Suárez o el fichaje, De Paul. El encuentro comenzó con mucho ritmo pero sin ocasiones claras, disputando cada balón en el centro del campo lejos de las áreas. Hasta que Lemar se sacó una gran conducción desde el centro del campo y dejó el balón en la frontal para Correa. Con un violento disparo, el argentino abrió el marcador que no se movería hasta el final. Iago Aspas tuvo el empate antes del descanso pero su disparo ante Oblak fue demasiado flojo.
La segunda parte comenzó con el mismo guion con el que terminó la primera, pero saltó todo por los aíres a los diez minutos. Marcos Llorente tocó el balón con la mano en el área y, previa visita al VAR, el árbitro señaló el penalti muy protestado por los rojiblancos. Iago Aspas marcó la pena máxima para poner el empate, pero el 1-1 iba a durar apenas unos instantes. En una contra velocísima, Saúl encontró solo a Correa en el área y el argentino consiguió su doblete con un potente disparo cruzado.
El Celta apretó y tuvo la ocasión de devolver el empate al marcador, pero Aspas no pudo embocar a portería después de sentar a Oblak. El partido terminó con mucha tensión, tangana incluida, que se saldó con la expulsión de Hugo Mallo y Mario Hermoso. El vigente campeón ya tiene sus primeros tres puntos.
