Las conversaciones entre las delegaciones rusa y ucraniana en Estambul comenzaron poco después de las 10H30 horas (07H30 horas GMT) del martes, informó la agencia oficial turca Anadolu.
Los negociadores fueron recibidos antes por el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, quien les pidió que “pongan fin a la tragedia” de la ofensiva rusa en Ucrania, que comenzó el 24 de febrero.
Las conversaciones se desarrollan en el palacio de Dolmabahçe en Estambul, la última residencia en el Bósforo de los sultanes que fue también la última sede administrativa del Imperio Otomano, y donde hay ahora oficinas de la presidencia turca.
“Ambas partes tienen preocupaciones legítimas, es posible llegar a una solución que sea aceptable para la comunidad internacional”, dijo al inicial del diálogo el jefe de Estado turco.
Erdogan indicó que depende de ambas partes “poner fin a esta tragedia” afirmando que “la prolongación del conflicto no interesa a nadie”.
“El mundo entero espera buenas noticias”, instó a los negociadores.
“Con un sentido de responsabilidad estoy seguro de que pueden alcanzar un alto el fuego permanente”, dijo Erdogan en un discurso dirigido a los delegados de ambas partes en la Oficina Presidencial del Palacio de Dolmabahçe de Estambul.
El mandatario expresó asimismo su confianza en que la reunión de hoy y mañana abra el camino para un encuentro a nivel de jefes de Gobierno.
“Creemos que no hay perdedores de una paz justa y equitativa. La continuación de la guerra no es del agrado de ninguna de las partes y un alto el fuego inmediato beneficiaría a todos”, subrayó el mandatario turco en su alocución televisada.
Aludiendo implícitamente a los combates diarios desde que el 24 de febrero las tropas rusas invadiera Ucrania, Erdogan consideró que llegó la hora de que el fuego cese “tan pronto como sea posible”.
Tras su breve recibimiento antes de partir hacia Uzbekistán, Erdogan dejó claro que Turquía no mediará directamente en estas conversaciones.
“Me voy a Uzbekistán después de este discurso, pero dejo aquí a mi ministro de Asuntos Exteriores. No tenemos la posición de mediador en las conversaciones, pero haremos de facilitadores”.
Turquía acogió el 10 de marzo en Antalya, en el sur del país, la primera reunión de ministros de Relaciones Exteriores de Rusia y Ucrania desde el inicio de la invasión rusa.
Sin embargo, esa reunión no condujo ni a un alto el fuego ni a ningún avance significativo.
Turquía, que comparte costas en el mar Negro con los dos países beligerantes, ha realizado gestiones desde el inicio de la crisis para mantener vínculos fluidos con las dos partes y se ha esforzado para mediar en el conflicto.
También se implicó, junto a Francia y Grecia, en la negociación de una evacuación humanitaria de los miles de civiles atrapados en el puerto ucraniano de Mariúpol, bajo un duro asedio de los rusos.
La reunión ha arrancado poco después de que el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, se dirigiera a los integrantes de ambas delegaciones para abogar por un alto el fuego y defendiera que un avance en este sentido allanaría el camino a un encuentro cara a cara entre los presidentes de Rusia y Ucrania, Vladimir Putin y Volodimir Zelensky, respectivamente.
Kirilo Timoshenko, ‘número dos’ de la oficina de la Presidencia ucraniana y miembro de la delegación negociadora, ha destacado antes del encuentro que Kiev insistirá en su demanda de garantías internacionales de seguridad. “La paz en Ucrania es nuestra principal tarea”, ha dicho, según ha recogido la agencia ucraniana de noticias UNIAN.
Las imágenes emitidas por los medios turcos muestran que entre los presentes figura Abramovich, quien sin embargo no está en la mesa principal. Abramovich se encuentra sentado junto al portavoz de Erdogan, Ibrahim Kalin, quien habría ayudado a coordinar los encuentros.
La aparición de Abramovich en Estambul apunta a que aún estaría implicado en los esfuerzos de mediación, después de que fuentes citadas por medios como ‘The Guardian’ o ‘The Wall Street Journal’ indicaran el lunes que tanto él como uno de los miembros de la delegación negociadora de Ucrania, Rustem Umerov, han tenido “síntomas de un posible envenenamiento” en las últimas semanas.
Sin embargo, el propio Umerov ha confirmado que está “bien” a través de un mensaje en Facebook. “Esta es mi respuesta a la prensa amarillista. No confiéis en ninguna información no verificada. También hay una guerra de la información en marcha”, advirtió el lunes.
Por su parte, el ministro de Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, ha recomendado este mismo martes a los miembros de la delegación que “no coman ni beban nada” y que “preferiblemente, eviten tocar cualquier superficie”, según ha recogido la cadena de televisión británica Sky News.
La ciudad turca de Antalya acogió el 10 de marzo el primer y hasta ahora único encuentro cara a cara entre los ministros de Exteriores de Rusia y Ucrania, Sergei Lavrov y Dimitro Kuleba, respectivamente. Bielorrusia ha sido escenario de varios encuentros entre las delegaciones negociadoras.
La invasión estalló el 24 de febrero tras la orden de invasión dada por Putin, quien días antes había reconocido la independencia de las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk, situadas en el este de Ucrania y escenario de un conflicto desde 2014.