El asesinato de un policía de tránsito, la quema de al menos cuatro vehículos y disturbios en algunos sectores se registró en Tuluá el 10 de febrero de 2024, lo que llevó a que se ordenara la militarización de esa ciudad del Valle del Cauca, en el suroeste de Colombia , este domingo.
La medida fue anunciada por la gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, quien dijo en su cuenta de X (antes Twitter ) que, para garantizar el orden público de Tuluá, «vamos a militarizar la ciudad para acompañar a la Policía en sus funciones».
Las acciones, explicó Toro, las están coordinando con la Policía, el Ejército y el alcalde de Tuluá, Gustavo Vélez, quien afirmó que decretó el toque de queda y además prohibió al «parrillero» -segundo pasajero- en moto.
La situación comenzó con el ataque a dos agentes de tránsito por parte de sicarios, en acciones separadas, pero con corto tiempo de intervalo entre ellas, que le costó la vida a uno. Adicional a esos atentados, también fueron quemados cuatro automóviles en acciones perpetradas en diferentes calles de Tuluá.
«Los delincuentes están reaccionando violentamente en Tuluá por la captura de sus cabecillas y las medidas que hemos tomado», añadió Toro, en referencia a las operaciones contra las bandas criminales que operan en esa ciudad. La más reciente acción de las autoridades permitió capturar a Mauricio Marín Silva, alias Nacho , jefe del grupo delincuencial La Inmaculada
Por su lado, el Ejército informó que 160 hombres de la Tercera Brigada refuerzan el dispositivo de seguridad en coordinación con la Policía y las autoridades regionales y locales. La tropa se enfocará en la implementación de puestos de control en vías de acceso, refuerzo operacional en puntos críticos y presencia en las vías del casco urbano.