Este sábado 10 de mayo (9 de mayo El Salvador), el Gobierno de Pakistán anunció el lanzamiento de una serie de ataques con misiles contra varias posiciones estratégicas en India, en lo que calificó como una respuesta a los bombardeos indios del pasado miércoles 7 de mayo. La operación fue denominada «Bunyan Marsoos» y fue confirmada por la oficina de prensa del Ejército pakistaní como una represalia a la “agresión india”.
Fuentes militares señalaron que los ataques alcanzaron una base aérea en Udhampur, un aeródromo en Pathankot y un centro de almacenamiento en Beas, en la provincia india de Punjab. De manera paralela, el espacio aéreo de Pakistán fue cerrado completamente desde las 3:15 a. m. (4:15 p. m. hora de El Salvador) hasta el mediodía del sábado en Pakistán para todo tipo de tráfico aéreo, como medida preventiva ante una posible escalada.
El miércoles anterior, India habría lanzado misiles contra bases aéreas pakistaníes como Noor Khan, Shorkot y Murid, aunque estos fueron interceptados por sistemas de defensa aérea. El Gobierno de Pakistán calificó esos ataques como un “flagrante acto de guerra”, luego de que se reportaran al menos 26 civiles muertos en su territorio. Nueva Delhi, por su parte, denunció 12 muertes tras bombardeos pakistaníes ese mismo día.
La televisión estatal de Pakistán también reportó un ciberataque masivo que habría dejado inoperativo el 70 % de la red eléctrica india, lo que fue descrito como “la oscuridad envolviendo a la India”. Se trata del episodio más grave de tensión bilateral entre ambos países desde hace más de 20 años.