Portando largos palos de madera y protegidos con escudos artesanales, unos 10.000 indígenas protestaron este martes en varios puntos de Quito contra el gobierno del conservador Guillermo Lasso, con el saldo en un manifestante fallecido.
Un indígena amazónico murió en una «confrontación» con la fuerza pública, informó la abogada Lina María Espinosa, de la Alianza de Organizaciones por los Derechos Humanos. «Se presentó una confrontación y a esta persona le disparan en el rostro, al parecer una bomba de gas lacrimógeno», dijo.
Unidades antidisturbios de la Policía de Ecuador arremetieron durante la noche de este martes contra cientos de indígenas que habían llegado al campus de la Universidad Central (Estatal) de Quito. La Policía usó abundante gas lacrimógeno en los predios del campus universitarios, convertidos por sus autoridades como centro de acogida de campesinos, sobre todo mujeres y niños, y declarada «zona de paz».
Noveno día de protestas
En tanto, muy cerca de la Universidad Salesiana que aloja a los manifestantes, se concentraron temprano los mayores choques con la policía antimotines en el noveno día de protestas indígenas para exigir la reducción de los precios del combustible.
Los agentes, varios en motocicleta y a caballo, intentaron dispersar a los manifestantes con gases lacrimógeno y chorros de agua lanzados por vehículos antimotines. La presencia policial era fuerte en el sector, donde además está la Casa de la Cultura Ecuatoriana (CCE) que tradicionalmente ha sido el punto de reunión de los indígenas.
Pero esta vez la policía instaló en este edificio rodeado de espejos su sede para controlar las protestas convocadas por la poderosa Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie).
También hubo focos de manifestaciones en el sur de Quito y cerca de la estatal Universidad Central (norte), según la policía.
La Alianza de Organizaciones por los Derechos Humanos reportó 79 civiles detenidos y 55 heridos desde el inicio de las protestas. La policía informó a su vez de 79 uniformados heridos y otros 27 retenidos por manifestantes pero luego liberados.
En casi un año, el diésel subió un 90% (a 1,90 dólares) y la gasolina corriente un 46% (a 2,55). Desde octubre pasado los precios están congelados por la presión social. La Conaie, liderada por Leonidas Iza, reclama rebajarlos a 1,50 y 2,10 dólares, respectivamente.
Democracia en riesgo
Tras nueve días de protestas en varios puntos del país que cortaron vías con neumáticos envueltos en llamas y afectaron la producción petrolera, el ministro de Defensa, Luis Lara, expresó que «la democracia del Ecuador está en serio riesgo».
La opositora Conaie participó en revueltas que derrocaron a tres mandatarios entre 1997 y 2005.
El Servicio de Seguridad ECU911 estimó que unos 10.000 manifestantes estaban en Quito, una ciudad de tres millones de habitantes.
Seis provincias ecuatorianas se hallan bajo estado de excepción, mediante el cual el Ejecutivo movilizó militares e implantó un toque de queda nocturno de siete horas.