La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó este miércoles una moción para avanzar un juicio político al presidente Donald Trump por un único cargo: el de “incitar a la insurrección”.
La votación en la Cámara para avanzar en la impugnación de Trump fue de 221 a 203 votos. La resolución, presentada por los representantes demócratas, describe los hechos del 6 de enero, cuando miles de personas se dieron cita en Washington D.C. para asistir a una marcha en la que el presidente dio un discurso con el cual, según la oposición, habría incitado la toma del Capitolio.
La decisión allanó la vía para una segunda votación que tendrá lugar durante la tarde, después de un debate de dos horas en que los legisladores expondrán sus puntos de vista sobre el juicio político.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, inició el debate alegando que Trump es «un peligro claro y presente” para el país.
«Sabemos que el presidente de Estados Unidos incitó a esta insurrección”, dijo Pelosi en referencia al estallido de disturbios del 6 de enero. “El presidente debe ser sometido a un juicio político”, agregó.
Pelosi dijo también que Trump ha mentido “repetidamente” sobre el resultado de la elección presidencial del 3 de noviembre y propagado dudas sobre el proceso democrático.
La resolución
En el discurso a sus seguidores, explica la resolución aludiendo al acto del 6 de enero, Trump “deliberadamente dio declaraciones que, en ese contexto, alentaron —y previsiblemente resultaron—en acciones ilegales en el Capitolio”. El texto cita una frase del presidente diciendo a los manifestantes “si no luchan en cuerpo y alma, ya no van a tener un país”.
Los legisladores acusan al presidente de haber puesto “en peligro la seguridad de Estados Unidos y sus instituciones de gobierno”, amenazar “la integridad del sistema democrático” e interferir “con la transición pacífica al poder”.
La Cámara de Representantes planea enviar al Senado el artículo de juicio político -es decir, el cargo del que se acusa al presidente- «lo más pronto posible», dijo el miércoles el segundo demócrata de mayor rango en la cámara, Steny Hoyer.
«No hay ninguna razón por la que no podamos enviarlo esta semana (…). Tenemos la intención de hacer eso», dijo a MSNBC en una entrevista, citando conversaciones con Pelosi.
La presidenta de la Cámara Baja también nombró ya a los nueve vocales que presentarán el caso de la Cámara durante el juicio en el Senado.
«Estamos debatiendo esta medida histórica en la escena del crimen», dijo el representante Jim McGovern, demócrata por Massachusetts.
Por su lado, el representante republicano por Missouri, Jason Smith, calificó el proceso de juicio político como «imprudente» e instó a los legisladores a poner «a las personas antes que a la política».
«El presidente Trump se irá en siete días. Tratemos de sanar a esta nación. Escuchemos al pueblo estadounidense (…). Trabajemos para la gente. Este país está sufriendo. La gente está sufriendo. Nuestros compañeros están sufriendo. Este es un juicio político imprudente. Esto solo traerá el odio más que nunca. Tengamos una conciencia. Pongamos a la gente antes que a la política. Unifiquemos a este país», dijo Smith.
McGovern aseguró, por su lado, que los disturbios en el Capitolio de Estados Unidos no habrían sucedido «si no hubiera sido por el ocupante de la Casa Blanca», aludiendo a Trump.
La Cámara ya votó sobre las reglas que regirán el proceso. En estos momentos se encuentra en un debate sobre la resolución del juicio político. La votación final comenzará alrededor de las 3 de la tarde, hora del este de EE.UU.
El Capitolio, nuevamente protagonista
Al menos cinco republicanos han dicho que se unirían a los demócratas para acusar a Trump por segunda vez, solo siete días antes de que deje el cargo y el presidente electo Joe Biden preste juramento, el 20 de enero. Un voto de la mayoría de la Cámara para destituir al mandatario saliente desencadenaría un juicio en el Senado, todavía controlado por los republicanos, aunque no estaba claro si dicho juicio se llevaría a cabo a tiempo para expulsar a Trump de la Casa Blanca.
Washington está en alerta máxima después de los disturbios y falta una semana para que culmine el mandato de Trump. Se planeó que miles de miembros de las tropas de la Guardia Nacional estuvieran disponibles. Incluso el miércoles el Capitolio estaba custodiado.
La Cámara inició su sesión poco después de las 9 de la mañana. justo en el sitio que fue objeto del asalto la pasada semana. Los demócratas avanzaron en sus propósitos después de que el vicepresidente Mike Pence rechazara un esfuerzo para persuadirlo de que invocara la 25ª Enmienda de la Constitución de Estados Unidos en el intento por destituir a Trump.
«No creo que ese curso de acción sea en el mejor interés de nuestra nación o sea consistente con nuestra Constitución», dijo Pence en una carta el martes por la noche a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
Pero, pese a la carta, la Cámara Baja aprobó una resolución el martes por la noche pidiendo formalmente a Pence que actúe. La votación final fue 223-205 a favor.
Con información de la voz de América