El presidente de Estados Un idos, Joe Biden firmó este viernes un decreto destinado a proteger el derecho al aborto en respuesta a la histórica decisión de la Corte Suprema que anuló la sentencia del caso Roe contra Wade.
“Esta no fue una decisión impulsada por la Constitución, y a pesar de lo que dijeron esos jueces en la mayoría, esta no fue una decisión impulsada por la historia”, dijo el presidente desde la Sala Roosevelt de la Casa Blanca.
“La verdad es que la mayoría de la Corte Suprema de hoy que está jugando rápido y suelto con los hechos incluso hace 150 años, el derecho consuetudinario en muchas leyes estatales no penalizaba el aborto temprano en el embarazo, lo cual es muy similar a la línea de viabilidad trazada por Roe, pero la mayoría de Dobbs ignora ese hecho”, dijo Biden, flanqueado por la vicepresidenta Kamala Harris y el secretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra, advirtiendo que la decisión de la mayoría de la corte “ignora que se promulgaron muchas leyes para proteger a las mujeres en el momento en que estaban muriendo por abortos inseguros».
Los demócratas y los defensores del derecho al aborto presionaron a la Casa Blanca para que adopte una postura más firme para codificar el acceso al aborto. El mes pasado, Biden insinuó que estaba considerando tomar un decreto, diciendo a Jimmy Kimmel que aunque, creía que el Congreso debía codificar Roe, «hay algunos decretos que podría emplear, creemos. Estamos estudiando eso ahora».
El decreto de este viernes hará que el secretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra, tome medidas para garantizar el acceso al aborto, incluyendo el aborto con medicamentos aprobado por la FDA y la ampliación del acceso «a toda la gama de servicios de salud reproductiva», según una hoja informativa de la administración compartida con CNN. Estos servicios incluyen «la anticoncepción de emergencia y la anticoncepción reversible de acción prolongada, como los dispositivos intrauterinos (DIU)», dice la hoja informativa, citando la cobertura del control de la natalidad en virtud de la Ley de Asistencia Asequible.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos (HHS, por sus siglas en inglés) tiene la tarea de presentar un informe en los próximos 30 días al presidente sobre la aplicación de las disposiciones del decreto, que también incluye medidas para aumentar la divulgación y proteger la privacidad médica y digital de las pacientes que buscan abortar.
Además, el decreto establece un grupo de trabajo interinstitucional entre el HHS y el Consejo de Política de Género de la Casa Blanca, que incluye al secretario de Justicia, Merrick Garland, quien, según la Casa Blanca, proporcionará «asistencia técnica a los estados que ofrezcan protección legal a las pacientes de otros estados, así como a los proveedores que ofrezcan atención médica reproductiva legal».