El regreso de Zinedine Zidane resultó el paliativo que Real Madrid necesitaba con urgencia. Pero más allá del alivio temporal el diagnóstico del equipo sigue siendo muy malo. Por eso, en la recta final de una temporada para el olvido, de las peores en la historia merengue, el foco empieza a apuntar a lo que viene. Y parece que la escoba barrerá con unos cuantos.
La nueva luna de miel de Zizou con la Casa Blanca duró apenas tres partidos. Arrancó con pie derecho en los triunfos ante Celta y Huesca pero en el primer desafío importante tropezó: Valencia lo frenó el miércoles al vencerlo en su casa 2-1 con un gol del argentino Ezequiel Garay.
Y lo que era un árbol de armonía pasajera dio paso nuevamente al bosque que mostró la realidad de un equipo que en esta temporada sufrió 15 derrotas entre Liga, Copa del Rey y Champions, algo que no ocurría desde la temporada 1993-1994. Y se acerca al peor registro de su historia, de 19 partidos perdidos en la campaña 1984-1985.
En España los medios deportivos tienen la servilleta puesta desde hace rato. Es que el acumulado es cruel: desde la salida de Cristiano Ronaldo -antes había decidido no renovar Zidane- todo lo que era oro dejó de brillar. De las tres Champions al hilo pasó a quedar eliminado frente al Ajax en octavos y tras una dura paliza en el Bernabéu. Por ese entonces, el ciclo de Santiago Solari, que llegó para apagar el fuego que había dejado Julen Lopetegui, ya se había deshilachado.
¿Qué se viene para Real Madrid? Quedan ocho partidos para el cierre de la temporada que pueden ser eternos. A 13 puntos del líder Barcelona y sin otro torneo al que apuntar, sólo interesa saber cómo responden algunos jugadores en esta recta final para terminar de inclinar la balanza a futuro.
Mientras tanto, ya trascendió una lista de figuras que Zidane ya no tendría más en cuenta. Y la nómina está plagada de pesos pesados. Según anunciaron en el programa El Chiringuito no seguirán en Real Madrid Toni Kroos, Marcelo, Gareth Bale, Casemiro, Keylor Navas, Raphaël Varane y hasta el propio Luka Modric, ganador del último Balón de Oro.
Otra figura que no cuenta con el aval de Zidane es James Rodríguez. El colombiano está a préstamo en Bayern Múnich y podría regresar para la próxima temporada, pero el DT francés, que no lo tenía en cuenta en su ciclo anterior, no piensa en repatriarlo.
Con todas estas salidas la Casa Blanca al mismo tiempo hará una caja importante para salir al mercado y renovarse. En Madrid hablan de alrededor de 500 millones de euros que podría recaudar el club con las ventas.
Por ejemplo, si el Bayern quiere quedarse con James deberá pagar 42 millones. Varane y Kroos están tasados en 80M cada uno. A Bale lo venderían en una cifra cercana a los 70 millones y por Marcelo pretenden entre 30 y 40.
«No estoy preocupado porque esto es lo que hay. Nos quedan 8 partidos y hay que acabarlos bien», dijo Zidane este viernes en conferencia de prensa.
Y defendió al plantel: «Ha sido un año difícil y complicado, pero son cosas que hay que aceptar. ¿Qué ha ganado toda esta gente? ¿Me puedes sacar el dato? Lo que ha ganado últimamente esta plantilla, lo que ha ganado hace cinco, seis, siete, ocho años… ¿Y qué? Este año es difícil y vamos a intentar cambiar eso. La necesidad de este club es volver a ganar y volver a hacer cosas grandes. Yo estoy aquí para eso. Nos quedan 8 partidos y lo vamos a hacer bien porque la gente nos quiere, aunque aceptamos las dificultades y aceptamos que vaya menos gente al campo. No estoy preocupado».
