El cierre de las escuelas en Brasil, debido a la pandemia del coronavirus, le dio a un niño de 11 años la posibilidad de perfeccionar sus habilidades en ‘skateboarding’ y de esa manera hacer historia al convertirse en la primera persona del mundo en lograr un salto con 1.080 grados de giro en una rampa vertical.
Más de dos décadas después que la leyenda estadounidense Tony Hawk completara el primer giro de 900 grados en monopatín, el joven brasileño Gui Khury consiguió hacer el pasado fin de semana tres rotaciones completas sobre su tabla, para de seguidas realizar un aterrizaje limpio.
En imágenes publicadas en redes sociales se puede apreciar el momento en el que Gui Khury realiza la vertiginosa maniobra con suma precisión y se escuchan gritos de festejo. «¡1.080!, no tengo palabras para explicar lo que acaba de pasar», escribió el joven en su cuenta de Instagram.
El padre del patinador, Ricardo Khury Filho, señaló que «el aislamiento por el coronavirus ayudó» a su hijo a conseguir este logro. «Ahora está más en casa, come mejor, tiene más tiempo para entrenar y puede concentrarse más en el entrenamiento», aseguró.
La maniobra en cuestión ha sido vista como uno de los «santos griales» en ese deporte. La estrella del monopatín Tony Hawk completó un giro de 900 grados cuando tenía ocho años, en 1999, nueve años antes de que Khury naciera.
Tan solo unos pocos patinadores han logrado replicar aquella hazaña en los años posteriores, pero en rampas más grandes, que les dan a los patinadores una mayor velocidad y elevación para completar los tres giros. La siguiente tarea de Khury es seguir practicando el giro de 1.080 grados para poder repetirlo en competiciones.