Real Oviedo tuvo una pelea de ultras de ambos equipos a pocos metros del estadio El Sardinero, donde varios vecinos de la zona se acercaron a los balcones para grabar el choque que detuvo las actividades cotidianas de los residentes.
La Segunda División de España tenía como plato fuerte este clásico enfrentamiento pero quedó opacado por la batalla campal que tuvo la calle Peña Herbosa como epicentro. Allí los bandos se lanzaron cualquier objeto que tuvieron a mano como sillas de los pequeños bares además de las clásicas bengalas encendidas y señales de tráfico que pusieron en riesgo la integridad de los transeúntes. El conflicto escaló al siguiente nivel cuando arrancaron los golpes de puños y patadas voladoras entre las facciones.
Según informaron distintas fuentes de la Delegación del Gobierno, los hinchas del Racing fueron los que iniciaron el enfrentamiento al haber ido a buscar a los del Oviedo con piedras. Una vez que aparecieron los cuerpos de seguridad y la policía local, lograron controlar la situación rápidamente y separar a los bandos para que se dirigieran hacia el estadio. Sin embargo, los daños que sufrieron los pequeños locales de la zona tardarán varios días en ser arreglados.
Las redes sociales del elenco local se encargaron de emitir un comunicado al respecto. “El Real Racing Club condena los actos violentos ocurridos esta mañana en Peña Herbosa y recuerda a sus aficionados la importancia de que haya fair play dentro y fuera del terreno de juego. Todos queremos disfrutar hoy de un buen día de fútbol en El Sardinero”, explicó. Por otra parte, el Real Oviedo no publicó nada respecto de los incidentes en los que estuvo involucrado un grupo de los 1500 hinchas que se movilizaron para acudir al partido.
Dentro del campo de juego, fue victoria para la visita por 1-0 con tanto de Borja Bastón desde el punto del penal y escaló a la sexta posición con seis puntos en tres fechas disputadas. El Racing quedó en el último puesto al haber caído en la totalidad de las jornadas de la Segunda División.
