La Sele, ovacionada en todo momento por los casi 27 mil fanáticos que asistieron al Rommel a despedirla antes del Mundial, no pasó apuros ante un cuadro europeo que, por momentos, fue ahogado por la táctica de ‘Bolillo’ Gómez.
La primera parte estuvo marcada por la buena actuación de José Luis Rodríguez. El hombre del KAA Gent dejó sus destellos de jugador que sabe asociarse, que encara y que no se esconde. Sin embargo, en algunas acciones, pecó de individualista. Más allá de eso, su partido fue positivo.
José Calderón, aquero panameño, al menos en la primera parte, fue un espectador más: no fue exigido y estuvo cómodo.
El complemento sí tuvo un cambio sustancial con el ingreso de Blas Pérez, quien, en los papeles, estaría en el Mundial, y de Ismael Díaz, un personaje pedido por la afición. Ricardo Ávila, por su parte, destacó con su gran criterio y con su visión.
Talento a tomar en cuenta para la gran cita mundialista… Entrando en los 70 minutos, Ismael se combinó con Blas y, con un gran pared, pusieron en aprietos a la zaga irlandesa. No obstante, la pelota, la cariñosa, dijo no y no ingresó…
Al final, la despedida fue emotiva. El Estadio Rommel Fernández recordará por siempre a Blas Pérez, Felipe Baloy, Luis Tejada, Gabriel Gómez, entre otros… El resultado, estéril por donde se le mire: 0-0… Rusia espera a Panamá.