México logró su segunda victoria en Copa Oro tras derrotar 3-1 a Haití gracias a los goles de Henry Martín, Santiago Giménez y un autogol de Ricardo Ade. Los caribeños descontaron gracias al gol de Danley Jean-Jacques.
Si bien el rival es infinitamente menor a México, y el equipo de Jaime Lozano no ha encontrado ni en Honduras ni en Haití a un equipo que le exija, la realidad es que la mejoría es notable.
El Tri pudo meter más goles, y debió hacerlo. Quizá, la gran queja que hoy debe existir para el México de Jaime Lozano es la definición. El primer tiempo parecía un entrenamiento de tiro a gol; lamentablemente, la anotación no cayó. En el segundo lapso la historia cambió.
Jaime Lozano no experimentó en cuanto a la alineación y repitió al mismo equipo que le ganó a Honduras.
En cuanto a funcionamiento, el equipo del ‘ Jimmy’ es agradable. Es ofensivo. Ataca, tiene variantes y pese al poco tiempo al frente de la selección, se ve muy trabajado.
Tal como sucedió contra Honduras, los aztecas se fueron al frente buscando abrir el marcador desde el primer minuto. Y muy rápido estuvo cerca de hacerlo por conducto de Edson Álvarez quien, de manera incomprensible, estrelló su disparo en el poste cuando estaba a menos de un metro de la línea de gol con el arquero vencido.
Esa sería la tónica de los primeros 45 minutos. Llegadas, desdobles, contragolpes, pases filtrados y disparos lejanos. México lo intentó de todo y con todos: Luis Chávez, Uriel Antuna, Jorge Sánchez y la más increíble, una de Henry Martín estando completamente solo adelantito del punto penal.
Haití estuvo cerca de pegar primero y sorprender luego de un grave error de Luis Romo. Afortunadamente, el remate del delantero haitiano y la buena colocación de Guillermo Ochoa lo evitó.
En el segundo tiempo era imperativo no caer en la desesperación y agarrarse de la paciencia para que el gol cayera. Antes que la presión agobiara, llegó el 1-0 gracias a un remendó desborde de Uriel Antuna, hoy el mejor del Tri, que acabó con un centro preciso del jugador del Cruz Azul para que Henry Martín ahora si no fallara. Abierta la lata, vendrían los demás goles.
Minutos más tarde, tras un gran contragolpe azteca, llegaría el 2-0 luego de un desborde de Jesús Gallardo que acabó en autogol haitiano por parte de Ricardo Ade. Y la realidad es que sí el 4 caribeño no llegaba, Orbelín Pineda iba a aparecer para marcar.
El descuento haitiano llegó a los 78 minutos y llegó a poner un poco de nervio a México. El gol caribeño cayó gracias al eterno mal del futbol azteca: el balón parado y el juego aéreo. Danley Jean-Jacques se elevó imponiéndose a la débil marca de Julián Araujo para el descuento.
Cuando Haití mejor jugaba, apareció, al fin, Santiago Giménez. El ‘Chaquito’ conectó un buen centro, nuevamente de Uriel Antuna, para sellar el 3-1 definitivo y que la algarabía en Arizona estallara por el gran cariño que se le tiene al futbolista del Feyenoord.
La mala noticia para el Tri fue la segunda tarjeta amarilla para Jorge Sánchez que lo obligará a perderse el encuentro ante Qatar por acumulación de tarjetas.
Para cerrar su participación en la Copa Oro, México se medirá a Qatar buscando no solo la perfección con una tercera victoria, sino que, al menos con un empate, asegurará su calificación y el primer lugar en el grupo.
