El próximo lunes se paralizará el planeta futbolístico. Es que en el Viejo Continente se llevará a cabo el sorteo que defina los cruces de los octavos de final de la Champions League y la expectativa aumenta día a día.
Están definidos casi todos los equipos clasificados: sólo resta definirse el último integrante del exclusivo grupo que disputará la instancia del mata mata del torneo más codiciado de Europa. Quedó pendiente el cruce entre Villarreal y Atalanta, hoy suspendido por una tormenta de nieve. El mismo pasó a este jueves, y uno de los dos ocupará la plaza del escolta en el Grupo F.
En el Bombo 1 (los que se consolidaron en la cima de sus grupos) estarán Manchester City, Liverpool, Real Madrid, Ajax, Bayern Munich, Manchester United, Lille y Juventus. Y sus rivales saldrán del Bombo 2, es decir, PSG, Atlético Madrid, Sporting de Lisboa, el Inter de Milán, Benfica, Salzburgo y Chelsea.
Sí, el último campeón fue relegado a la condición de escolta tras el empate de 3-3 frente al Zenit como visitante y la victoria de la Juventus, que le arrebató el liderazgo. Peor le fue al Barcelona, que tras el 0-3 contra el Bayern Múnich quedó eliminado en la fase de grupos y deberá conformarse con jugar la Europa League.
De este modo, las especulaciones con un posible cruce entre Cristiano Ronaldo y Lionel Messi acaparan la atención del mundo deportivo. El recuerdo nostálgico de las veces que se dirimieron la gloria en el pasado, cuando uno defendía la camiseta del Real Madrid y el otro la del Barcelona, impone un entusiasmo cargado de talento y admiración.
Por lo pronto, solo tres participantes lograron avanzar a la fase de los 16 mejores con puntaje ideal, dado que tanto el Liverpool de Jürgen Klopp como el Ajax de Erik ten Hag y el Bayern Múnich de Julian Nagelsmann ganaron todos sus compromisos y no tuvieron problemas para sacar los pasajes.
Los enfrentamientos de los octavos de final se conocerán el lunes (11h00 GMT) en el sorteo organizado por la UEFA en su sede de Nyon, en Suiza.
Según el reglamento, los cruces no podrán establecerse con dos equipos que se hayan enfrentado en la misma llave en la fase de grupos, ni a dos rivales que pertenezcan al mismo país. Es decir, que no podrá darse un posible derby madrileño entre Merengues y Colchoneros.
Por lo demás, el proceso obedece a unas reglas simples. Los 16 equipos partirán de dos bombos diferentes, según su recorrido en la fase de grupos: por un lado, los ganadores de las llaves (llamados cabezas de serie), y por el otro, los segundos de cada zona.
Un equipo del bombo 1 y otro del bombo 2 quedarán emparejados para formar la primera eliminatoria y así sucesivamente hasta el octavo y último enfrentamiento. Los cabezas de serie cuentan con dos ventajas: medirse a un rival teóricamente más débil y disputar el partido de vuelta, decisivo para la clasificación, en su propio estadio. El lunes se sabrá la verdad.
