Tienen fama, dinero y juegan en la liga de baloncesto más poderosa del mundo, sin embargo, parece que nada de todo esto llena el vacío que sienten los jugadores de la NBA, según explicó Adam Silver, Comisionado del torneo, en la MIT Sloan Sports Analytics Conference.
El abogado de 56 años sorprendió al comentar acerca de los conflictos psicológicos que atraviesan varias estrellas de la NBA, a diferencia de lo que la mayoría cree.
«Cuando me reúno con ellos lo que me sorprende es ver que son realmente infelices Hay algunos aspectos, uno de ellos es un tema social más amplio. Vivimos un poco en la época de la ansiedad y parte de eso está directamente relacionado con las redes sociales», explicó Adam Silver.
El Comisionado agregó que «desde el mundo exterior la gente ve que ellos tienen fama, dinero y todos los adornos que eso conlleva, pero hay muchos jóvenes jugadores que son generalmente infelices».
A pesar de que los fans piensan que los basquetbolistas de la NBA tienen todo para estar satisfechos, Silver explicó que hay pequeños gestos que ayudan a comprender la situación que viven: «Si estás cerca de un equipo verás que siempre están con sus auriculares escuchando música, están aislados, mirando hacia abajo. La realidad es que muchos jugadores no quieren jugar juntos, hay una gran cantidad de celos entre nuestros jugadores».
La NBA ha incrementado en los últimos años su desarrollo en la capacitación y acompañamiento de sus jugadores para que éstos no sufran la presión de lo que significa ser estrellas de deporte. En este marco, ha creado un programa llamado «Career crossover», por el cual los jugadores veteranos tienen la posibilidad de hacer pasantías no rentadas en importantes empresas.
En agosto de 2018, tras las confesiones de varios jugadores, se conoció que «más del 40% de los jugadores» padece problemas relacionados a la ansiedad y la depresión. «Es una epidemia en nuestra liga. Estoy hablando de todo, de trastorno de déficit de atención, bipolaridad, ansiedad, depresión…», explicó John Lucas II, asistente de Houston Rockets y ex jugador profesional.
Sus declaraciones fueron respaldadas por William D. Parham, director del Departamento de Salud mental y bienestar de la asociación de jugadores, quien explicó que si bien se trata de una estimación, la cifra no se aleja de la realidad. Parham había alertado que el pincipal problema era que sólo el 5% decidía tratárselo.