El Bayern ha echado el freno de mano en la operación Lewandowski. El club alemán había decidido vender al delantero para evitar un problema de vestuario y sacar rédito económico impidiendo que saliera libre a finales de temporada, pero la dificultad para encontrar un buen sustituto está cambiando sus planes. Por ello, los dirigentes del Bayern hablaron con extrema dureza tras la petición de Lewandowski de salir este verano y declarándole prácticamente intransferible.
El Bayern se movió para intentar fichar a Haaland en el último momento pero no pudo impedir su traspaso al City y ahora está negociando a marchas forzadas por Sadio Mané (Liverpool) y Darwin Núñez (Benfica), pero los precios son prohibitivos y el club alemán no quiere invertir tanto dinero. Hay mucha tensión entre las partes y ya han comunicado al entorno del polaco que no escucharán ofertas si no tienen atado un recambio.
La intención del agente de Lewandowski, Pini Zahavi, era reunirse en los próximos días con el Bayern para presentar ya la primera propuesta oficial de traspaso del Barça y comenzar a negociar. La postura del delantero no tiene marcha atrás por lo que intentarán llegar al mejor acuerdo para todas las partes y esperan que el Bayern sea lo suficientemente ágil para firmar cuanto antes a un delantero que pueda paliar la baja de Lewandowski. Es muy probable que la operación pueda atrasarse y al Bayern ahora le interesa mantenerse firme para no encarecer el fichaje de una nueva estrella ofensiva. Es todo ya cuestión de táctica negociadora.
Tanto el Bayern como Lewandowski saben que están condenados a entenderse, pero también es cierto que los alemanes no pueden quedarse sin una referencia ofensiva tan importante y no ficharán a cualquier jugador. Tienen claros sus planes pero todo pasa porque puedan llegar a un acuerdo con alguna estrella en las próximas semanas y ya tienen claro que el mercado de delanteros está por las nubes. El club alemán siempre ha sido muy conservador en cuanto a inversiones y no desean realizar un gran gasto económico. El Benfica pide unos 100 millones por Darwin, mientras que el Liverpool se niega a negociar por Mané. Hoy por hoy está todo bloqueado.
En el Barça no tienen prisa. Con Lewandowski está todo pactado y a la espera de llegar a un acuerdo con el Bayern. Saben que es el paso más complicado de todo este asunto que comenzó a perfilarse a partir del mes de enero cuando el delantero polaco decidió jugar en el Camp Nou. En el club blaugrana están convencidos de que todo se arreglará con un traspaso por unos 35-40 millones de euros aunque no creen que sea rápido. La idea es que Lewandowski sí pueda estar en el inicio de la pretemporada aunque todo ahora está en manos de un Bayern que, a pesar de su enfado público, está buscando sustituto.