Miles de versiones giran alrededor de la figura de Mauro Icardi, tras entrar en conflicto con la dirigencia del Inter. Estuvo más de un mes fuera de las canchas y perdió la cinta de capitán a manos del arquero Samir Handanovic.
Aunque el delantero volvió a defender la camiseta nerazzurra sobre el final de la temporada, su futuro es una incógnita. Los mandatarios del club, mientras negocian por la renovación de su contrato, dejaron entrever sus ganas de seguir contando con él; pero la prensa italiana sostiene que el director deportivo mantuvo una charla con Juventus para concretar un trueque por Paulo Dybala.
En una nota con Verissimo, programa que se emite por Canale 5, Wanda Nara, esposa y representante de Icardi, dio detalles con respecto al futuro del habitual convocado por Lionel Scaloni en la selección argentina.
«Él continúa anotando goles. Él sigue adelante porque es el más fuerte de la familia», comenzó su relato la mediática agente del futbolista. Y luego, agregó: «Está más tranquilo ahora. Abraza a todos sus compañeros porque siempre ha tenido una relación maravillosa con todos».
«Seguramente el año que viene seguiremos en Italia», soltó la empresaria. Aunque la conductora tomó la frase como un guiño para el Inter, lo cierto es que con esa respuesta la pareja de Icardi también dejó abierta la posibilidad de un posible desembarco a Juventus.
Wanda Nara, entre lágrimas, también defendió al deportista ante las acusaciones de Ivana Icardi. «No soy una bruja. Siempre hemos ayudado a la familia. Ivana vino a mi casa hace un par de meses y le abrimos las puertas a «ella y a su novio, que también es futbolista. Ivana no es sincera. Mauro es un gran hombre, no solo ayuda a la familia, sino que también ayuda a personas que no conocemos. A ella le regaló un coche para ayudarla. Está hablando mal de su hermano, esto no tiene precio», argumentó.
Para cerrar, al borde de las lágrimas, esbozó: «Las personas que nos conocen realmente saben cómo somos. La vida no termina en una transmisión. Ella sabe que siempre estamos ahí después de todo. Si quisiera encontrar a Mauro podría venir a casa y no ir al Gran Hermano. La gente habla sobre las cosas de la familia en su casa y no en la televisión. Mauro y yo nunca iremos a la televisión por esto».