El Barcelona expuso una versión nostálgica que recordó los tiempos de Pep Guardiola y aplastó al Real Madrid en una victoria por 3 a 1 que le permitió quedarse con la Supercopa de España, en la final desarrollada en el estadio Rey Fahd de Riad, en la capital de Arabia Saudita.
Tuvieron que pasar 638 días para que el Culé vuelva a levantar un trofeo oficial, un hecho que marcó el primer título después de la salida de Lionel Messi de la entidad catalana. El conjunto blaugrana fue netamente superior a los merengues, para quedarse con merecido triunfo y adueñarse de la corona doméstica.
Uno de los hombres más destacados de la jornada fue Robert Lewandowski, quien alcanzó un récord histórico que había fijado Ronaldo en la potencia de la Ciudad Condal. Es que el artillero polaco se transformó con su tanto en el jugador que más rápido en alcanzó los 20 goles en 22 presentaciones para el Barça desde que la leyenda brasileña lo había logrado en 1997.
Una precisa definición del juvenil español Gavi, luego de una excelente maniobra colectiva y una brillante asistencia del polaco, a los 36 minutos de la etapa inicial, sirvió para el 1 a 0 parcial. Antes de llegar al descanso, luego de otra muy buena jugada ofensiva con los mismos intérpretes pero con la fórmula cambiada, Gavi habilitó a Lewandowski y el legendario atacante con pasado en el Bayern Múnich celebró el 2 a 0 para encaminar la gloria y marcar su hito personal.
En el complemento, el equipo dirigido por el italiano Carlo Ancelotti trató de reaccionar, pero su intento chocó contra la superioridad de Barcelona, que dominó futbolística y estratégicamente el partido, por lo que no extrañó que el conjunto Culé ampliara la ventaja. Gavi recuperó por presión la pelota en la media cancha y cedió para Lewandowski, quien le devolvió el balón por izquierda al volante, para que éste, tras desbordar, enviara un centro rasante y cruzado, que Pedri tocara hacia la red con un toque corto en el segundo palo.
Sobre el final del encuentro, cuando iban dos minutos de descuento, el Real Madrid logró descontar tras una serie de rebotes y un disparo potente del francés Karim Benzemá.
En las semifinales, el elenco de Xavi derrotó por penales a Real Betis por 4 a 2, tras igualar 2 a 2 al cabo de 120 minutos de juego; mientras que la Casa Blanca venció a Valencia por 4 a 3, también en la tanda de disparos desde los doce pasos, tras empatar 1 a 1 luego del período reglamentario y el suplementario.