Borussia Dortmund volvió a sorprender al mundo este martes al vencer 1-0 a PSG en París y sellar su clasificación a la final de la UEFA Champions League, con un solitario gol de Mats Hummels en el comienzo del segundo tiempo de un partido que se puede revivir en Star+ (solo para Sudamérica).
El equipo de Terzic ya se había impuesto en la ida por el mismo marcador y demostró mucho carácter y coraje, además de inteligencia, para jugar un partido perfecto en el Parque de los Príncipes, frente a un conjunto con más nombres que trató de arremeter desde el minuto cero.
Tuvo suerte el Dortmund, claro, porque PSG estrelló seis tiros en los palos. Pero nunca perdió la templanza para defender cerca de su área y aguantar el cero ante cada intento de los locales.
De esta forma, diez años después de aquella derrota frente al Bayern Munich en Wembley, quedó en la puerta de la segunda Champions en su historia después de haber obtenido la edición 1996/97 frente a Juventus. La casualidad volverá a citar a los aurinegros en la capital inglesa, como en aquel mayo de 2013. Pero esta vez, la historia puede ser distinta.
De aquel Dortmund de Klopp a este de Terzic hay matices y diferencias. Y también razones por las que definirá el torneo, claro. ¿Por qué llegaron los alemanes menos pensados a tener la posibilidad de ser campeones en esta Champions?
Los escollos que sorteó Dortmund para llegar a la final
El equipo de Terzic se metió entre los mejores tras dejar en el camino a PSV (1-1 en Países Bajos, 2-0 en Alemania), al Atlético Madrid del Cholo Simeone en una serie cambiante y llena de goles. El conjunto alemán aprovechó el envión de la localía para revertir el 1-2 que se trajo de España y, si bien la cosa se había complicado en el complemento, sacó el partido adelante con mucho fútbol y empuje.
En semis, no la tuvo fácil ante un PSG al que había enfrentado en fase de grupos y al que no pudo derrotar en ninguno de los dos enfrentamientos previos. Pero un equipo más constituido fue demasiado para varios pesos pesados sueltos, como un Mbappé que soñaba desesperadamente con ganar su primera Champions en su última temporada en París. Dos triunfos por 1-0 sellaron su boleto rumbo al partido más importante de la temporada europea.
Dortmund, localía fuerte y salidas para prestar atención
El primer concepto que suele asociarse con Dortmund es el famoso ‘Muro Amarillo’ del Signal Iduna Park, un símbolo del equipo que ha recorrido el mundo y que hoy recibe muestras de respeto por todos los fanáticos del fútbol.
Esta tribuna especial del Dortmund, con capacidad para 25.000 fanáticos alocados y con un posicionamiento vertical que intimida, es lo que el ‘You’ll Never Walk Alone’ para Liverpool. Una insignia que va más allá de lo cultural y lo representativo de este equipo. Una masa de hinchas que en su conjunto se convierten en el motor de los once jugadores del Dortmund cuando las cosas no pintan bien. Es un estadio ruidoso, con mucha energía y donde varios equipos de prestigio han salido heridos tras 90 minutos en ese campo de juego. Tal como le pasó a Atlético Madrid: ni siquiera hacer dos goles fuera de casa le sirvieron para pasar la eliminatoria en Alemania.
En lo que va de la Champions, Dortmund no ha perdido ni un juego en el Signal Iduna Park de los seis que disputó, con cuatro triunfos y dos empates. En los mata-mata ha ganado ambos: 2-0 a PSV, 4-2 a Atlético Madrid en un partidazo y una ventaja mínima pero satisfactoria frente a PSG. Para sus lamentos, la final se jugará en Wembley y no en su estadio. Pero eso no será razón suficiente para que sus hinchas no se acerquen hasta Londres.
Suma, además, que el equipo también sea un hueso duro de roer como visitante. En la Bundesliga, tiene buenos números y es el equipo que más puntos sacó solo por detrás del histórico Bayer Leverkusen de Xabi Alonso. De 16 juegos que tuvo en esta condición, ganó ocho, empató seis y perdió solamente dos. Y el temple mostrado en el Parque de los Príncipes para ir a buscar una clasificación ilusiona.
Goleo repartido, sin dependencias en ofensiva en Dortmund
Al analizar las estadísticas de la actual Champions, hay algo que se resalta: Dortmund no tienen a ningún jugador entre los 10 primeros goleadores. De hecho, no es ni cerca de los que más ha convertido en esta edición, con apenas 17 tantos. Luego viene Bayern con 18, PSG con 19 y Real Madrid lidera con 23. Manchester City es puntero absoluto en este apartado, con 28.
De esos 17, nueve fueron anotados en las series de octavos, cuartos de final y semifinales. Dortmund no es un equipo que necesite generar mucho para convertir, como se vio en el torneo.
Lo importante para el Dortmund es que no depende de un solo jugador para anotar goles. No necesitó de un rendimiento particular para romper partidos. Fulkrug, tras el tanto en la ida ante PSG, es el goleador con tres en esta Champions. Lo siguen de cerca Marco Reus, que ya no es titular, Adeyemi, y Brandt, todos con 2. Haller, Sabitzer, Maatsen, Nmecha, Bynoe-Gittens, Malen y Sancho completan el listado de goleadores. La diversidad de anotadores es clave. Cualquiera puede marcar la diferencia en una serie cerrada, como hizo Hummels ante los parisinos.
Hummels, el estandarte defensivo del Dortmund
Dortmund llegó, junto a Bayern Munich, como uno de los semifinalistas que menos goles recibieron: ambos sufrieron solo nueve anotaciones. Además, los de Terzic lograron cinco vallas invictas, que por ahora es el récord máximo en la actual edición. Y la solidez defensiva tiene nombre y apellido en defensa: se trata de Mats Hummels.
El inoxidable defensor alemán, que ha vestido también la camiseta de Bayern, es el jugador con más minutos de Dortmund en la actual Champions con 990. Hummels es, por diferencia, el que más juega en este Borussia, seguido por el arquero Kobel, que acumula 900.
Hummels se ha ganado la confianza de todo el equipo y de su entrenador gracias a su experiencia y cualidades defensivas. Ni siquiera el penal que cometió ante PSV o el gol en contra ante Atlético Madrid puso en duda su relevancia defensiva para Dortmund.
Mats es el futbolista que más balones recuperó:, muy por encima de Schlotterbeck, su compañero de zaga. Sumado a esta dupla de centrales formidable, Dortmund también cuenta con un arquero, Gregor Kobel, que destacó en esta Champions con sus atajadas.
Pese a las molestias físicas Hummels no se perdió el duelo de ida ante PSG y también fue clave en la vuelta.
Sabitzer, el jugador que despertó en el Dortmund
El volante austríaco llegó al Dortmund en julio de 2023 y, si bien su rendimiento nunca fue malo, se ha destapado en el último mes, momento clave para el equipo en esta gran temporada. Sabitzer se ha convertido en un jugador cambia-partidos en sus últimas tres presentaciones, aportando goles y asistencias.
Su excelente racha inició el 13 de abril, ante Borussia Mönchengladbach. En ese juego, Sabitzer anotó un doblete y le dio la victoria a su equipo por 2-1. Tres días después, fue figura ante Atlético Madrid en el Signal Iduna Park.
Primero asistió a Ian Maatsen para el 2-0 a los 39 minutos. En el complemento entregó otro pase-gol para Niclas Fullkrug, que marcó el 3-2 con un cabezazo. El propio Sabitzer fue autor del cuarto gol de la jornada con un disparo de zurda cruzado que venció a Oblak, que se estiró pero no llegó.
El 21 de abril, Dortmund se midió ante el campeón Bayer Leverkusen y Sabitzer fue titular otra vez, sumando una nueva asistencia. El volante de 30 años levantó un centro perfecto hacia la ubicación de Fullkrug, que con una volea anotó el 1-0, que finalmente fue 1-1.
En un momento delicado de la temporada y con la ilusión del título, Dortmund necesita de un Sabitzer determinante, que en mediocampo aporte gol, asistencia y sea el clarificador en los momentos pesados.
Con las cartas sobre la mesa, Dortmund definirá un nuevo certamen europeo. Y deberá hacerlo frente al ganador de Real Madrid o Bayern Munich, en una nueva chance para tocar la gloria en Europa, algo que le es esquivo desde hace casi 20 años.