Cada jornada que pasa, el Bayern Múnich da un nuevo paso hacia su octavo título consecutivo en la Bundesliga. La Fecha 30 se presentaba para una prueba de fuego para los vigentes campeones porque visitaban al Bayer Leverkusen de Peter Bosz, su gran verdugo en la liga alemana, pero se impusieron por 4-2 y lograron superar un difícil escollo para conseguir un nuevo trofeo.
Todo comenzó a pura intensidad, con el Leverkusen apelando un poco menos a su habitual juego asociado y siendo más directos, pero con la misma vehemencia en la presión para recuperar el balón lo más alto posible, en campo rival. Solo 9 minutos tardaron Los Obreros en abrir el marcador y el encargado fue el argentino Lucas Alario, primera vez titular desde que re reanudó el torneo, quien corrió al espacio y definió de manera magistral cara a cara con Manuel Neuer.
Pero el empate del Bayern llegó en el minuto 27, en los pies del francés Kingsley Coman. Y a partir de allí el elenco bávaro demostró que le sobran recursos para destrabar un juego, por más difícil que sea. El Leverkusen le había cerrado muy bien sus primeros pases pero se adaptó, Thomas Müller empezó a jugar entre lineas, mientras que Serge Gnabry y Coman lastimaron de afuera hacia adentro. Así logró imponerse con jerarquía y liquidar el pleito con goles de Leon Goretzka, el propio Gnabry y Robert Lewandowski.
Los Obreros, que también tuvieron como titular al chileno Charles Aránguiz –Exequiel Palacios fue suplente y no ingresó–, se habían convertido en una piedra en el zapato de Los Bávaros desde la llegada del entrenador holandés. Con Bosz en el banquillo, el Leverkusen se impuso a domicilio ante el Bayern en la primera vuelta de la actual temporada por 1-2 y en el último enfrentamiento en la temporada anterior por 3-1.
Pero esta vez el cuadro muniqués no dejó dudas y logró una goleada que lo acerca más a su octavo título de la Bundesliga en fila. Tiene 10 puntos de ventaja sobre el Borussia Dortmund (un partido más), suman cinco triunfo en cinco juego desde la reanudación del campeonato y tienen al polaco Robert Lewandowski, máximo goleador del torneo con 30 tantos, y a Thomas Müller, líder de asistencias con 20 pases de gol.
Bajo las órdenes de Hansi Flick, el cuadro muniqués ha ganado 23 partidos de 26 posibles (suma sólo dos derrotas y un empate) en todas las competiciones y recuperaron la solidez que los caracteriza, lo que también lo pone como serio candidato en la UEFA Champions League, a donde llegará con mucho rodaje y con la liga sentenciada.
En simultáneo, el Fortuna Düsseldorf igualó 2-2 ante Hoffenheim, el Eintracht Frankfurt cayó por 2-0 ante el Mainz y el RB Leipzig igualó 1-1 con el Paderborn. La jornada de sábado se completa con la presentación del escolta, Borussia Dortmund, ante el Hertha Berlin, invicto (ganó tres partidos y empató uno) desde que se retomó el campeonato.