Ousmane Dembélé y el Barcelona han puesto fin a uno de los culebrones deportivos más largos de los últimos tiempos. Club y futbolista han llegado a un acuerdo por el cual Ousmane vestirá de azulgrana las dos próximas temporadas y con una considerable rebaja de su sueldo y en las variables. El acuerdo era un hecho desde hace varios días y Dembélé ya se había incorporado este martes a los entrenamientos después de haber llegado a un acuerdo con Xavi para adelantar su regreso. El francés ya ha hecho dos sesiones con el grupo. Un vez con el acuerdo firmado, Dembélé podrá ir a la gira en Estados Unidos. El equipo se va el sábado.
En los últimos días las dos partes habían avanzado considerablemente en las negociaciones después de la reunión que mantuvieron los agentes del jugador con Jordi Cruyff y Mateu Alemany hace dos semanas. Las dos partes expusieron en el encuentro sus posturas e intentaron buscar la fórmula para la renovación del futbolista que ha llegado finalmente este miércoles.
El primer objetivo que se había marcado Dembélé era continuar en el Barcelona. Pocos le creyeron porque en todo este tiempo se ha dicho de todo del jugador. Primero que si desde antes de Navidad ya tenía firmado un acuerdo con otro club y que era el motivo por el que no quiso renovar en enero. El tiempo ha demostrado que era mentira. Y lo mismo cuando se dijo a final de temporada que se iba al PSG con el que había llegado a un acuerdo. Nueva falsedad.
Dembélé ha tenido que convivir todos estos meses con esos rumores cuando él realmente quería seguir en el Barcelona. Lo dijo siempre, en su círculo privado y también a Xavi Hernández, que siempre ha sido su gran valedor en el club. No se puede entender la renovación de Dembélé sin la figura del técnico. Primero frenó a la Directiva que quería que el jugador no volviera a jugar más después del cierre del mercado invernal.
Y también ha sido vital en este verano cuando ha insistido una y otra vez a Laporta para que el club hiciera un esfuerzo y renovara al futbolista. Para Xavi es vital por su desequilibrio y tiene plena confianza en él como ha demostrado en la segunda parte de la temporada en la que ha sido un titular indiscutible.
