Un irlandés llamado Robert McCaffrey llegó hasta lo más alto de un rocódromo sin usar sus manos. Lo hizo con tan solo el movimiento de sus piernas y su impresionante equilibrio.
Según el hábil alpinista, se animó a intentar subir con sus manos detrás de la espalda como parte de un reto propuesto en el sitio donde entrena. No le dio mucha importancia a su hazaña hasta que se viralizó en redes sociales y provocó asombro.