Un grupo de rescatistas de Tulsa, Oklahoma (EE.UU), atendió el reporte de «un cuerpo» en el río de Arkansas.
Al acercarse a la supuesta víctima, quien vestía un pantalón y yacía en una parte poco profunda del río, el equipo se llevó la sorpresa de que el hombre en realidad estaba vivo y solo dormía una siesta mientras se refrescaba por el calor del verano.
Las autoridades solicitaron a los residentes mantenerse a salvo y encontrar «formas alternativas de refrescarse».
