Un grupo internacional de astrónomos presentó recientemente el mayor mapa cartográfico de agujeros negros supermasivos activos que viven en los centros de las galaxias del universo visible. El proyecto registra la ubicación de alrededor de 1,3 millones de estos cuásares en el espacio y el tiempo, los mismos que pueden ser cientos de veces más brillantes que una galaxia entera.
«Este catálogo de cuásares se diferencia de todos los catálogos anteriores en que nos proporciona un mapa tridimensional del mayor volumen del universo», señaló el cocreador del mapa David Hogg, profesor de la Universidad de Nueva York (EE.UU.). «No es el catálogo con más cuásares ni es el catálogo con mediciones de cuásares de mejor calidad, se trata del catálogo con el mayor volumen total del universo cartografiado», subrayó.
Un producto secundario
Según Kate Storey-Fisher, del Centro Internacional de Física de Donostia en España, pudieron construir el nuevo mapa utilizando datos «extras» del telescopio espacial Gaia de la Agencia Espacial Europea. Si bien el objetivo principal de Gaia es mapear las estrellas de nuestra galaxia, también detecta inadvertidamente objetos fuera de la Vía Láctea, como cuásares y otras galaxias, mientras escanea el cielo.
«Este catálogo de cuásares es un gran ejemplo de lo productivos que son los proyectos astronómicos», afirmó Hogg. «Gaia fue diseñado para medir estrellas en nuestra propia galaxia, pero al mismo tiempo también encontró millones de cuásares, lo que nos proporciona un mapa de todo el universo», aseveró.
Materia oscura y más
Las galaxias habitadas por los cuásares están rodeadas por enormes halos de material invisible llamado materia oscura. Al estudiar los cuásares, los astrónomos pueden aprender más sobre la materia oscura, como por ejemplo cuánto se acumula. También pueden utilizar las ubicaciones de los cuásares distantes y sus galaxias anfitrionas para comprender mejor cómo se expandió el cosmos con el tiempo.
«Ha sido muy emocionante ver cómo este catálogo estimula tanta ciencia nueva», indicó Storey-Fisher. «Investigadores de todo el mundo están utilizando el mapa de cuásares para medir todo, desde las fluctuaciones de densidad iniciales que sembraron la red cósmica hasta la distribución de los vacíos cósmicos y el movimiento de nuestro sistema solar a través del universo», añadió.
El equipo también creó un mapa que muestra dónde se espera que el polvo, las estrellas y otros objetos bloqueen la visión de ciertos cuásares, lo cual es fundamental para interpretar los datos. Los autores publicaron el catálogo este lunes en The Astrophysical Journal.