Una familia que estaba de vacaciones en Miami se encontró recientemente con una sorprendente escena en la piscina de la casa que había alquilado por Airbnb: un cocodrilo encaramado en la parte superior de un flotador en forma de cocodrilo.
Dave Jacobs, residente en el estado de Georgia, relató que la familia, que viajó a Florida para una boda, primero vio al cocodrilo en un laguna cerca de su casa de vacaciones y al día siguiente el reptil apareció en la piscina. Su esposa llamó al dueño de la vivienda, quien contrató a un cazador de caimanes para sacar al animal del lugar.
En declaraciones a Miami New Times, Jacobs relató que, si bien hay cocodrilos en Georgia, estos suelen estar «en áreas que no están tan pobladas, como en pantanos donde nadie vive». «Pero en Florida, están justo en sus vecindarios», añadió.