Una turista borracha, identificada como Kimberly Nicole Day, dejó a su hija de siete años sola en el bar de un hotel y cuando fue arrestada se obligó a vomitar y luego le escupió el vómito a los policías
Kimberly Nicole Day, de 28 años y residente de Fort Myers, fue arrestada y acusada de negligencia infantil, resistirse al arresto y tres cargos más de agresión contra un agente del orden público después del gran altercado que armó afuera del Marriott Courtyard Hotel en Marathon.
La policía del Condado Monroe recibió una llamada para que fuera al hotel a las 10:18 p.m. del pasado 30 de junio, donde al llegar, los agentes encontraron a Day en la acera, «extremadamente ebria» y sujetando a su hija, señala el reporte.
La policía dijo que Day se apretó tanto contra su hija que la niña apenas podía respirar. Por ello, los agentes la obligaron a abrir los brazos y le quitaron a la niña. Fue entonces que Day pateó a un agente, quien de inmediato la lanzó al suelo donde ella siguió tirándoles patadas. Cuando los agentes la sujetaban en el suelo, Day se obligó a vomitar y luego le escupió el vómito a los policías.
Sin embargo, el vómito no fue el único fluido corporal que Day trató de utilizar como arma de ataque. «Kimberly trató de defecar en la mano y le gritó a los agentes que les lanzaría el excremento a las caras», se dice en el reporte policial. Los policías le pusieron una máscara para que no pudiera escupir y le amarraron las piernas.
El Departamento de Niños y Familias de la Florida (DCF) acudió al lugar para ocuparse de la niña, mientras que Day fue llevada al Hospital Comunitario Fishermen, donde las autoridades la acusaron de escupir a una enfermera y de amenazarla verbalmente.
Un agente tuvo que pedirle al personal del hospital que sedaran a Day. Posteriormente, fue llevada al Centro de Detención de Stock Island. Sin embargo, el lunes salió en libertad.