El módulo de aterrizaje no tripulado de Japón SLIM se reactivó tras sobrevivir una segunda noche lunar —que equivale a unas dos semanas terrestres— y transmitió nuevas imágenes a la Tierra, anunció este jueves la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA).
«Anoche recibimos una respuesta de SLIM, confirmando que la nave espacial logró superar la noche lunar por segunda vez», escribió la agencia espacial japonesa. «Como el Sol todavía estaba alto y el equipo aún estaba caliente, solo hicimos algunas tomas del paisaje habitual con la cámara de navegación», agregó.
Algunos sensores de temperatura y pilas de batería no utilizadas del módulo de alunizaje ya están empezando a presentar fallos, pero la mayoría de las funciones de SLIM que sobrevivieron a la primera noche lunar «se mantuvieron incluso después de la segunda noche lunar», indicó JAXA.
El SLIM aterrizó en la Luna el 20 de enero, convirtiendo a Japón en el quinto país en colocar un aparato en el satélite de la Tierra, después de la Unión Soviética, EE.UU., China y la India. Unas tres horas después del alunizaje, JAXA decidió apagarlo con un 12 % de energía restante para poder reiniciarlo más adelante.
El módulo de aterrizaje ‘resucitó’ por dos días el 29 de enero, cuando cambió el ángulo del Sol, y transmitió imágenes de un cráter. No diseñado para las gélidas noches lunares en las que las temperaturas bajan hasta 133 grados bajo cero, SLIM de alguna manera logró sobrevivir su primera noche lunar y se despertó por última vez el 26 de febrero, cuando la Luna entró en una ola de calor, con 100 grados. Volvió al estado de hibernación varios días después, cuando el sol dejó de brillar.
