Las primeras imágenes de la sonda Solar Orbiter, la nueva misión de la Agencia Espacial Europea (ESA) y de la NASA, revelaron múltiples minierupciones solares, descritas como ‘fogatas’, sobre la superficie de nuestra estrella, comunicó este jueves la ESA.
«Estas son solo las primeras imágenes y ya podemos ver nuevos e interesantes fenómenos», afirmó Daniel Müller, uno de los científicos del proyecto.
Se trata de las imágenes más cercanas del Sol que se hayan tomado jamás: la nave espacial estaba a solo 77 millones de kilómetros de la estrella, aproximadamente la mitad de la distancia entre la Tierra y el Sol.
Según explicó David Berghmans, del Real Observatorio de Bélgica, las ‘fogatas’ son pequeños «parientes» de las erupciones solares que los científicos observan desde la Tierra, pero «millones o miles de millones de veces más pequeñas». «El Sol puede parecer tranquilo a primera vista, pero cuando miramos en detalle, podemos ver esas llamaradas en miniatura en todos lados», agregó.
Sin embargo, los científicos todavía no saben si estas ‘hogueras’ son solo versiones diminutas de las grandes erupciones o si son producidas por mecanismos de otro tipo.
La sonda Solar Orbiter, lanzada el pasado 10 de febrero, cuenta con 6 telescopios que toman imágenes del Sol y de sus alrededores y con 4 instrumentos que observan el entorno alrededor de la nave. Comparando los datos de ambos conjuntos, los investigadores buscan obtener información sobre la formación del viento solar, las corrientes de partículas cargadas liberadas por el Sol que influyen en todo el sistema solar.