Todos sabemos que en Australia están los animales más extraños, bonitos y peligroso del mundo, pero en el caso de la Chelodina Longicollis, lo único peligroso que tiene es la pronunciación de su nombre.
Esta criatura es una tortuga con el cuello muy largo, parece un diplodocus enano a la menor escala. Esta tortuga habita en cualquier lugar de Australia que tenga agua, pero se encuentra más en la zona del suroeste (Adelaide, Victoria, New South Wales y Queensland). Su caparazón es generalmente negro y a veces café.
Además de tener un cuello increíblemente largo –para una tortuga–, también se diferencia de las demás especies por retraerlo girando hacia un lado en lugar de sólo meterlo directamente. Para darnos una idea del largo de su cuello, este es un 60% del tamaño de su caparazón.
Para su reproducción, una tortuga hembra de esta especie puede poner entre 4 y 20 huevos durante primavera y comienzos de verano en pequeños agujeros dentro de pantanos y arroyos. Estas tortugas son carnívoras, se alimentan de varios moluscos, crustáceos, peces pequeños, ranas y diferentes insectos.
Otra cosa peculiar es su método de defensa, si se siente amenazada lanzan un olor similar al de los zorrillos y esta acción le ha generado el apodo de «apestosa».
Es cero recomendable tener una de mascota, pues independientemente de su condición exótica, sus mandíbulas son extremadamente fuertes y filosas, una mordida podría costarte la existencia terrestre.10