Científicos chilenos descubrieron los restos de un elefante de 12.000 años de antigüedad cerca del lago Tagua Tagua, en el sur de Santiago de Chile.
Tras el hallazgo, los investigadores sugieren que los gonfoterios, parientes extintos del elefante moderno, podrían haber sido objeto de cacerías grupales por parte de los habitantes de la región, ya que pesaban hasta cuatro toneladas y podían alcanzar los tres metros.
El descubrimiento se produce en el marco de una expedición arqueológica del Instituto Catalán de Paleoecologia Humana y Evolución Social (IPHES) y la Pontificia Universidad Católica de Chile para el proyecto de investigación ‘Primeros pasos humanos en América del Sur, caminando entre gonfoterios’, con el objetivo de arrojar luz sobre las primeras poblaciones humanas del continente.
«La hipótesis con la que estamos trabajando es que se trata de caza, eventos de caza», detalló el arqueólogo Carlos Tornero, codirector del estudio. «Creemos esto porque el gonfoterio es un animal muy grande y peligroso, y probablemente requirió de varias personas [para cazarlo]», agregó.
Los científicos aseguran que el descubrimiento les permitirá estudiar el impacto humano más amplio en la región y cómo un clima cambiante afectó a los animales en el área durante ese tiempo.
«Podemos obtener mucha información de aquí, por ejemplo, con respecto al cambio climático, cómo afectó a los animales», explicó Elisa Calas, arqueóloga que también trabaja en el sitio. «La influencia que los humanos tuvieron en el medio ambiente está muy en línea con lo que está sucediendo ahora en términos del medio ambiente», añadió.