La momia de una niña de ocho años que en 1890 fue donada por un diplomático estadounidense al museo de la Universidad de Michigan (EE.UU.) fue devuelta a Bolivia, donde será examinada antes de su exposición, prevista para noviembre próximo.
Bautizada como ‘la ñusta’, fue presentada este lunes en la Cancillería boliviana, en La Paz, y, de acuerdo con el Ministerio de Culturas y Turismo, su técnica de momificación demuestra que está asociada con la cultura pacajes, de entre 1100 y 1450, aunque también posee atributos incas, período que fue desde 1450 a 1532.
«Es una responsabilidad de Estado, como una obligación de nuestro Gobierno, recuperar nuestros bienes patrimoniales, nuestros bienes culturales que son parte de la vida y de la construcción de nuestro Estado Plurinacional», expresó el canciller, Diego Pary, al firmar el acta de entrega de diversos objetos arqueológicos recuperados de EE.UU., Chile y Argentina.
Pary consideró que este caso puede ser «el más emblemático» de todos, ya que «es la primera vez que se recupera una momia desde el extranjero».
La niña, cuyas causas de muerte aún se desconocen, fue hallada junto a un ajuar funerario que incluía una bolsa de maíz, frutas, frijoles, una calabaza con pequeños guijarros, sandalias de cuero y una honda, elementos que también fueron devueltos.
Por su parte, la ministra de Culturas, Wilma Alanoca, anunció que la momia, al igual que los demás objetos, permanecerán en el Museo Nacional de Arqueología de La Paz y serán sometidos a exámenes científicos y de laboratorio para conseguir más información sobre ellos.
Bolivia también logró repatriar un kero (vaso) procedente de Argentina y fósiles trilobites que se encontraban en Chile.