El subsecretario de Seguridad Pública del Estado de Michoacán, Carlos Gómez Arrieta, renunció a su cago, tras la difusión de un video donde un hombre presuntamente detenido por la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, fue torturado durante un interrogatorio.
De acuerdo al diario El Pais, la voz del hombre que interroga pertenece a Gómez Arrieta, entonces encargado de la Procuraduría General de la República.
La decisión del funcionario de seguridad de separarse de su cargo es a fin de facilitar y atender las investigaciones que se deriven.
«Reiteramos nuestra disposición para coadyuvar con las autoridades competentes en la indagatoria, relacionada con los lamentables hechos ocurridos en el año 2014 en el estado de Guerrero», señaló la SSP Michoacán.
Ayer, salió a la luz una grabación que muestra una persona maniatada responder a las preguntas de un hombre presuntamente de la Fiscalía Federal.
Minutos después de interrogarlo, la persona en uniforme le coloca una bolsa en la cabeza, la cierra y estira.
El 26 de septiembre de 2014 desaparecieron 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, a manos de Fuerzas del Estado que los habrían entregado a un grupo criminal, luego de haber tomado la terminal de Iguala para trasladarse a un mitin en Ciudad de México.
Desde que iniciaron las investigaciones se han presentado una serie de acusaciones en contra de agente de distintas corporaciones por la presunta obtención de confesiones a través de torturas a detenidos.
Según un informe del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humano, al menos 34 detenidos habían sido torturados a manos de agentes de la policía ministerial, adscrita a la Fiscalía Federal.
La persona torturada en la grabación publicada en YouTube sería Carlos Canto, arrestado el 22 de octubre de 2014, en Iguala, Guerrero.
En el interrogatorio el sujeto confiesa que unos 12 o 13 normalistas fueron entregados a policías ministeriales en el Tomatal, la entrada y salida a Chilpancingo.
«A esas casas has ido tú. ¿Si nos puedes acompañar para decir dónde están las pinches casas?», cuestionaron los elementos de seguridad quienes parecen dudar y le cubren la cabeza con una bolsa de plástico.