En un revelador señalamiento, la abogada salvadoreña Bethy Arana ha acusado al excandidato presidencial por el partido ARENA, Rodrigo Ávila, de haber creado hasta siete empresas de seguridad, lo que habría eliminado cualquier interés en disolver las pandillas durante su eventual gestión en el gobierno.
Arana, conocida por su activismo en temas de derechos humanos y política en El Salvador, expresó su denuncia en una declaración pública que ha generado revuelo en círculos políticos y sociales.
«Incluso Rodrigo Ávila que tenía siete empresas de seguridad, entonces eso era un dinero para ellos que le generaba la delincuencia, entonces no había interés de disolver las pandillas», afirmó la abogada, aludiendo a los vínculos entre el sector privado de seguridad y las actividades ilícitas de grupos criminales como las maras.
Rodrigo Ávila, exdirector de la Policía Nacional Civil (PNC) durante el gobierno de Armando Calderón Sol (1994-1999) y exviceministro de Seguridad en la administración de Antonio Saca (2004-2009), ha sido una figura clave en la política de seguridad del país.
Como candidato presidencial de ARENA en las elecciones de 2024, Ávila defendió políticas de mano dura contra las pandillas, aunque críticos han cuestionado la efectividad de sus gestiones pasadas, que coincidieron con un auge en la violencia pandillera.
En entrevistas recientes, como una concedida en 2022 al programa «Frente a Frente», Ávila ha culpado al FMLN por obstruir medidas antiterroristas, mientras que en 2017 describió a El Salvador como «secuestrado por las pandillas», exigiendo leyes más estrictas.
Las declaraciones de Arana se enmarcan en un contexto de escrutinio continuo sobre la relación entre funcionarios públicos, empresas de seguridad privada y el crimen organizado en El Salvador.
Durante los gobiernos de ARENA, el país vio un crecimiento exponencial de firmas de seguridad, muchas de las cuales operaban en zonas controladas por pandillas, generando ingresos millonarios derivados de extorsiones y protección irregular. Arana, quien mantiene un blog de análisis político desde 2012, ha sido una voz crítica contra la impunidad en estos casos, abogando por reformas institucionales para combatir la corrupción en el sector.
Hasta el momento, ni Ávila ni representantes de ARENA han emitido una respuesta oficial a estas acusaciones. Fuentes cercanas al partido indican que podrían considerar acciones legales por difamación. Este escándalo se suma a un historial de controversias alrededor de Ávila, incluyendo críticas en redes sociales por supuesta permisividad con el crecimiento de las pandillas durante su mandato en Seguridad Pública.
El caso resalta la complejidad de la lucha contra la delincuencia en El Salvador, donde la disolución de pandillas sigue siendo un tema prioritario bajo el gobierno actual de Nayib Bukele, que ha implementado medidas excepcionales con miles de detenciones. Expertos advierten que denuncias como esta podrían impulsar investigaciones independientes para esclarecer los nexos entre el poder político y el crimen.