El Salvador comenzó a reorganizar sus reservas de Bitcoin con el fin de reforzar la seguridad de sus fondos. La medida consiste en trasladar las criptomonedas de una sola dirección a múltiples direcciones nuevas y vacías, cada una con un límite de hasta 500 Bitcoin.
La decisión busca proteger el patrimonio frente a posibles riesgos tecnológicos, incluyendo el desarrollo de computadoras cuánticas, que en el futuro podrían vulnerar la seguridad de las claves criptográficas. Al dividir los fondos en varias direcciones, el impacto de un eventual ataque se reduciría significativamente.
Anteriormente, el país mantenía todos los fondos en una sola dirección para fines de transparencia, lo que dejaba expuestas de forma constante las claves públicas. Ahora, con un tablero público que permitirá monitorear las nuevas direcciones, se garantiza tanto la seguridad como la transparencia en la gestión de la Reserva Estratégica de Bitcoin implementada por el Presidente Nayib Bukele.
Con esta estrategia, El Salvador apuesta por un modelo de resguardo más sólido que combina diversificación, reducción de riesgos y supervisión abierta para los ciudadanos.
