Así se encuentra la Sala de Emergencia del Hospital Escuela en Tegucigalpa. Los pacientes se ven obligados a recibir atención médica en el piso de este nosocomio.
Los testimonios de los médicos revelan que dentro de la sala de operaciones la cerámica se está despegando, no hay insumos y cada vez tienen menos motivación para trabajar debido a la escasez de apoyo por parte del hospital. Además, los pacientes se ven relegados a esperar en camillas defectuosas y, en los casos más críticos, incluso en el suelo, debido a la falta de equipo.
Esto solo empeora la atención que reciben los afectados y la calidad del ambiente laboral dentro de las salas. Gerardo Castejón, jefe de la Emergencia del Hospital Escuela, explicó: “Estamos sobresaturados también en las salas. Hay problemas en los quirófanos porque no contamos con un autoclave, y al final nos vamos quedando sin ropa estéril”.
La situación empeora cuando se analiza la calidad de la atención médica. Honduras es el peor país de la región en cuanto a la cantidad de médicos por habitante. En la actualidad existen apenas 4.6 médicos por cada 10,000 hondureños, lo que implica que un especialista tendría que atender a más de 2,174 personas al día, según un informe realizado por la Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ).