Un grupo internacional de investigadores reveló que el descubrimiento de restos fósiles humanos extremadamente raros ha ampliado la compresión sobre el misterioso origen del ‘Homo floresiensis’, una diminuta especie humana que existió hace unos 700.000 años en la isla indonesia de Flores, informó este miércoles la Universidad de Griffith (Australia).
El ‘H. floresiensis’ hizo su primera aparición en el registro arqueológico en 2003 con el hallazgo de un esqueleto en la cueva de Liang Bua, ubicada en la parte occidental de la isla de Flores. En ese momento, se estimó que el esqueleto de 60.000 años de antigüedad tenía una altura de 106 centímetros.
Debido a su diminuta estatura, el fósil recibió el sobrenombre de ‘hobbit’ en honor a los personajes ficticios del escritor británico J.R.R. Tolkien. La comunidad científica comenzó a interesarse en estos homínidos de cuerpos pequeños, puesto que su tamaño desafiaba las teorías predominantes sobre la evolución humana.
Se propuso una hipótesis de que los huesos descubiertos hace casi 20 años provenían de humanos con trastornos del crecimiento. Sin embargo, los investigadores rechazaron esa explicación, ya que la anatomía de las personas que padecen actualmente este síndrome no corresponde con la de los fósiles.
El origen de los ‘hobbits’
En 2016, los arqueólogos desenterraron más restos óseos, que consistían en seis dientes y una mandíbula, en el yacimiento de Mata Menge, 75 kilómetros al este de Liang Bua. La mandíbula encontrada no solo era más pequeña que la del ‘H. floresiensis’, sino también más antigua, por lo que los científicos consideraron que era anterior a los homínidos de Liang Bua en 650.000 años.
No obstante, como en ese momento no se hallaron huesos poscraneales (todos aquellos situados por debajo del cráneo), no se pudo confirmar si los homínidos de Mata Menge eran más pequeños que los de Liang Bua. Pero un estudio publicado en la revista Nature Communications desvela que el reciente hallazgo de otros tres fósiles de homínidos en Mata Menge ofreció evidencia acerca de los ancestros de los ‘H. floresiensis’, así como de su tamaño corporal.
De acuerdo con los investigadores, lo más importante es que este nuevo conjunto de restos óseos incluye un fragmento de un húmero adulto (la mitad inferior del hueso del brazo superior). Basándose en la longitud estimada del húmero, se pudo calcular que la altura corporal de este homínido era de 100 centímetros, 6 centímetros menos que la altura estimada del ‘H. floresiensis’ de Liang Bua.
En busca de su ancestro
Por otro lado, uno de los dos dientes encontrados en Mata Menge, además de ser pequeño, presenta características similares a los de los ‘Homo erectus’ de la isla de Java, también en Indonesia, que eran tan grandes como los humanos modernos. Los especialistas teorizan que las similitudes entre los fósiles de Mata Menge y los del ‘H. erectus’ de Java proporcionan una fuerte evidencia de que el ‘H. floresiensis’ desciende de esa especie.
«Esto significa que el ‘Homo floresiensis’ experimentó una reducción drástica del tamaño corporal en comparación con el ‘Homo erectus’, de gran tamaño, cuyo tamaño corporal era similar al de los humanos modernos», indicó el profesor Yousuke Kaifu. Por su parte, el investigador Adam Brumm señala que el tamaño corporal de los ‘H. erectus’ se redujo drásticamente cuando estos quedaron aislados en la isla de Flores hace alrededor de un millón de años, dando origen al ‘H. floresiensis’.