Jean-Claude Van Damme se consolidó como una de las principales estrellas de acción de Hollywood en los años ochenta. Por esa época, el actor asumió el papel principal en la película Cyborg, dirigida por Albert Pyun.
La trama se desarrolla en un mundo postapocalíptico, donde el intérprete encarna a Gibson Rickenbacker, un luchador que se embarca en una peligrosa misión para proteger información vital que podría salvar a la humanidad de una plaga devastadora.
La demanda contra Van Dame
Durante el rodaje de Cyborg, Van Damme se vio envuelto en un incidente que resultó en una lesión para el actor Jackson Rock Pinckney, quien interpretó a uno de los antagonistas.
En una escena de lucha, Jean-Claude -en un intento por darle realismo a su actuación- golpeó accidentalmente el ojo izquierdo a su compañero mientras manejaba un cuchillo de goma de utilería.
Pinckney, quien anteriormente había sido soldado, presentó una demanda contra el protagonista, en 1993, reclamando una compensación de 800 mil dólares, por los daños sufridos, así como la pérdida de su carrera militar como resultado de las lesiones.
«Van Damme viene hacia mí, yo hice un movimiento de balanceo. Con una de sus piernas lanzó una patada a mi mano para quitarme el cuchillo, él tenía otro cuchillo en su mano y cuando estuvo justo sobre mí, me golpeó el ojo», comentó el demandante a Ten News.
Demanda no afectó la carrera de Van Damme
A pesar de las afirmaciones de Van Damme de que el incidente fue un accidente, el tribunal falló a favor de Pinckney, ordenando al actor a pagar la compensación por los daños causados.
Aunque el incidente causó controversia y repercusiones legales para el actor, esta situación no afectó su éxito y continuó trabajando en la industria cinematográfica.
Tras el estreno de Cyborg, Jean-Claude protagonizó películas taquilleras como Kickboxer y Lionheart, consolidando su posición como una de las figuras más destacadas del género.