La compañía japonesa Crazy, que organiza fiestas de casamiento, ha implementado compensaciones económicas para sus empleados que duermen suficientes horas, ya que estima que quienes descansan bien por la noche trabajan mejor, así informó la agencia Bloomberg.
El método para controlar el cumplimiento de los requisitos es un sistema de control del sueño mediante colchones con sensores desarrollado por la firma Airweave. Posteriormente, una aplicación procesa los datos recolectados y determina cuánto tiempo duerme cada persona.
Recompensas
Para que puedan disfrutar de ese beneficio, los trabajadores deben dormir al menos seis horas por noche durante un mínimo de cinco días a la semana. Cuando cumplen con esta condición, obtienen puntos que canjean en la cafetería de su empresa.
De momento, la recompensa máxima equivale a $570 anuales, aunque en el futuro Crazy planea permitir que puedan intercambiar esos créditos por dinero real, según declaró un representante de la agencia RIA Novosti.
En Japón, el 92 % de los mayores de 20 años afirman que no duermen el tiempo suficiente y la economía de ese país pierde cerca de $138.000 millones al año por causas relacionadas con la falta de sueño de los trabajadores.
La cultura local que promueve el sacrificio personal por el bien colectivo y el déficit de mano de obra provocó la aparición de «karoshi» —término japonés que designa <<muerte por exceso de trabajo>>—, un fenómeno que ya se cobró la vida de una persona en el año 2015.