Varias familias externaron su preocupación ante la muerte de unas quince personas, entre hombre y mujeres, por la supuesta venta de licor adulterado en el municipio de Sonzacate, en Sonsonate.
Los decesos se vienen contabilizando desde hace un mes y el más reciente registrado es el de José Ramiro Flores Belarmino, de 45 años, quien fue sepultado la tarde del martes 31 de julio en el cementerio general de ese municipio.
Un tanto consternado, uno de sus familiares dijo que por la mañana llegó a dicho lugar a tomarse un trato de guaro y que horas más tarde murió de forma extraña, “él era trabajador, no era borracho como alguien pudiera decir”.
Según testigos, solo el 8 de julio murieron cuatro personas, entre ellos tres hombres y una mujer, luego de haber ingerido licor que compraron en una cantina del callejón El Nance, del cantón El Almendro, de Sonzacate.
Entre ellos Edwin Noé Lue Cortez, Norma Liseth Genovez, Balmore Zetino García y Guillermo Tepas, quienes también fueron enterrados en el cementerio de Sonzacate.
Las familias afectadas pidieron a las autoridades correspondientes investigar el caso, para evitar que más personas sigan muriendo por consumir licor adulterado.
Sin embargo, las autoridades de Salud, de la Fiscalía General de la República y de la Policía Nacional Civil, aún no han dado una versión oficial de los hechos.
Eso es bueno si se mira desde otro punto de vista, los bolos ya no van a chupar por miedo a morirse.
Parece que la noticia es cierta según me lo comentó una persona que vive en Sonzacate, sin embargo, parece que no era el licor, sino alcohol puro, no se sabe a ciencia cierta, pero si me comentó que en dos semanas ya iban como 20 muertos.