El Inter marcha con paso firme hacia la conquista del ‘Scudetto’. Un tempranero gol de Romelu Lukaku a los 33 segundos facilitó el triunfo del líder sobre el Genoa, que Darmian certificó tras la pausa a pase del belga. Alexis redondeó la goleada (3-0) para los de Antonio Conte, que dominaron el duelo de cabo a rabo. Esta victoria abre una brecha de diez puntos sobre la Juve y obliga al Milan a vencer a la Roma para no renunciar al título de forma casi definitiva.
Un ‘Scudetto’ al que los ‘nerazzurri’ se postulan como el candidato más sólido. Sin más competiciones en juego, los de Conte llegan al tramo decisivo del curso en su pico de forma y con la moral por las nubes. Son un equipo fiable, que acumula una sola derrota en las últimas 20 jornadas, y con más recursos desde el asentamiento de Eriksen en lugar de Vidal.
Aunque el estandarte de este equipo siga siendo, por méritos propios, Romelu Lukaku. Una semana después de exhibirse en el derbi ante el Milan, el gigante belga necesitó 33 segundos para decantar la balanza. A Lautaro le bastó un toque para desatarlo. Pura potencia, trazó una impetuosa diagonal ante la que Zapata respondió con pavor. El cafetero le dio demasiado espacio y cuando quiso responder, el cuero descansaba en el fondo de la red. Sutil remate esquinado de Lukaku, imposible para Perin.
El Genoa, que desde la llegada de Ballardini al banquillo solo había perdido un duelo de diez disputados en Serie A, fue incapaz de responder. Quizás pesaron en exceso las múltiples rotaciones del técnico pensando en el derbi del miércoles contra la Sampdoria, pero lo cierto es que el ‘Grifone’ jamás puso en apuros a Handanovic.
El Inter estuvo muy cómodo en todo momento. Cuando el Genoa esperaba en campo propio, tocaba y tocaba hasta conectar cerca del área con Lukaku, Barella y Lautaro. Se aceleraba entonces el ataque para desesperación de la zaga ‘rossoblù’, siempre superada. Suerte de los reflejos de Perin. El arquero paró dos disparos al argentino y otros dos al belga. También se alió con él la madera, que rechazó un tiro colocado de Barella. Y a Darmian, sustituto del sancionado Achraf, se le escapó un remate por un alfiler.
Pero si el ‘Grifone’ se atrevía a adelantar líneas para presionar, Lukaku castigaba la espalda de los centrocampistas. Sucedió así tras el descanso, en la acción que sentenció el partido. El belga arrancó y, como un imán, atrajo a hasta cuatro defensas. Muy listo, levantó la cabeza para asistir a Darmian, completamente solo en la derecha. El derechazo del italiano, raso y ajustado, fue inapelable.
Con el encuentro visto para sentencia, Alexis entró desde el banquillo para redondear la goleada en su primera intervención. Perin había salvado un primer disparo de Lukaku, pero el tocopillano estuvo atento para cabecear un despeje en falso de la zaga. Solo los reflejos del arquero evitaron una goleada aún más contundente.
