Los automovilistas que este domingo circulaban por la autopista A36 del departamento Doubs en Alsacia, Francia, fueron testigos de varios incendios que «surgieron a lo largo de casi 6 kilómetros como resultado del descuido de un conductor que llevaba un horno de pizza aún caliente», informa el diario l’Alsace.
A lo largo de la carretera apareció una espesa nube de humo que atrajo a los bomberos y la policía. Los gendarmes identificaron un vehículo que se dirigía hacia Estrasburgo, de cuyo remolque se escapaban las brasas y se dispersaban por la autopista, y detuvieron al conductor.
Según la investigación, el residente de Alsace pasó el fin de semana en la Côte-d’Or haciendo pizzas. Cuando se dirigió a casa, las brasas del interior del horno, que aún no se habían apagado, fueron atizadas por las fuertes corrientes del viento, calentándose aún más, dispersándose y prendiendo la hierba seca a lo largo de la carretera, causando incendios en una superficie de 4.000 metros cuadrados.
Las pruebas de toxicología mostraron la presencia de drogas en la sangre del conductor, que será procesado por destrucción imprudente.