Este lunes se ha conocido que ya son siete las víctimas mortales que se ha cobrado el coronavirus en Italia, que se ha convertido en el tercer país del mundo por número de infecciones, con 219 casos confirmados, según la agencia ANSA.
El último fallecido era un hombre de 80 años que había sido ingresado el jueves pasado después de sufrir un ataque cardiaco. Poco antes trascendía que había una sexta víctima, fallecida en el Hospital Civil de Brescia proveniente de Crema, en Lombardía, al norte de Italia. Se trataba de una paciente oncológica que ya tenía un cuadro clínico muy complicado, según informa Il Corriere della Sera.
Ambos se suman así al quinto fallecimiento, conocido también este lunes por la mañana: un hombre de 88 años de edad del que se desconoce si padecía patologías previas.
La región más afectada del país es Lombardía, donde ya se ha verificado que 172 personas se encuentran infectadas por el virus. La otra región con más casos es Véneto, con 27.
Las autoridades están intentando averiguar cuál es la conexión entre ambos brotes, y actualmente se sospecha de un agricultor de Alberttone, una localidad del Véneto, que había visitado Codogno y otros centros en el área de Lodi, foco del virus en Lombardía.
Medidas de seguridad en Italia.
El pasado domingo, Italia extremó las medidas para contener lo que se considera el mayor brote del coronavirus fuera de Asia. Las autoridades aislaron las ciudades más afectadas y prohibieron las concentraciones públicas en gran parte del norte.
En varias zonas septentrionales se ordenó el cierre de las escuelas y universidades durante al menos una semana, así como de los museos, cines y teatros, incluida la legendaria La Scala de Milán. Asimismo, fueron cancelados los últimos dos días del Carnaval de Venecia, que atrae a miles de turistas de todo el mundo, así como cuatro partidos de fútbol de la Serie A.
Venecia también prohibió las misas públicas, al igual que la región de Lombardía, donde se concentra la mayor parte de los casos, y donde también ha cerrado sus puertas a los visitantes la famosa catedral de Milán. Por otro lado, se ha decidido cerrar pubs y discotecas desde las seis de la tarde del domingo. La Semana de la Moda de Milán también se vio afectada, con algunos desfiles cancelados y otros, como el de Armani, celebrados a puerta cerrada.
Evaluación de la OMS y la UE sobre el terreno
Por el momento Francia y Suiza han descartado cerrar sus fronteras y realizar cualquier tipo de restricción sobre la libre circulación de las personas. Distinta suerte han corrido los pasajeros de un avión de Alitalia, que ha sido retenido nada más aterrizar en el aeropuerto de Mauricio, en el Océano Índico. Las autoridades locales han decidido que los pasajeros solo podrán entrar en el país si aceptan someterse a un período de cuarentena en dos hospitales de la capital.
La comisaria europea para Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, ha anunciado durante una rueda de medios en Bruselas que «de acuerdo con las autoridades italianas, una misión conjunta de la OMS [Organización Mundial de la Salud] y el ECDC [el Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades] partirá mañana a Italia para evaluar la situación sobre el terreno».
Mientras tanto, la Comisión de la UE ha asignado 232 millones de euros para ayudar a la lucha mundial contra la propagación del coronavirus.
Extraño, como este virus solo mueren enfermos terminales y ancianos, pareciera una estrategia de limpieza. Tampoco me extrañaría que tenga que ver con los fondos de pensiones por tanto anciano muerto.