Rene Martínez Pineda es sociología por la universidad de El Salvador, en donde fue director de la Escuela de Ciencias Sociales. Cuenta con un postgrado en Demografía por el CELADE, con un Máster en Ciencias de la Educación por la Universidad Tecnológica.
Autor de varios libros y ensayos entre ellos: “Sociología y otros demonios” publicado por la Editorial Universitaria de la Universidad de El Salvador. Además, se ha desempeñado como investigador, catedrático y actual columnista del periódico Co_Latino.
Pineda es un analista frecuentemente invitado a diversos foros de televisión para discutir la realidad nacional; el sociólogo considera que los magistrados de la sala de lo constitucional destituidos por la Asamblea legislativa, representaban la verdadera dictadura del país. Estos y otros temas de interés nacional fueron abordados en la entrevista Hora25, de Órbita TV, conducido por Carlos Hermann Bruch.
Te presentamos como columnista del Co_Latino, yo tenía casi pensado que ese periódico ya no existía.
Fíjate que el Co_Latino en este momento nada más se mantiene la versión digital, el diario tuvo serios problemas económicos, como premisa historia para los lectores, este es el periódico más antiguo del país, es casi un patrimonio cultural; estuvo en dirección de Francisco Valencia. La crisis económica que ha atravesado el periódico data de los años ochenta, por un boicot declarado de la ANEP, en donde ellos dijeron a sus empresas que no publicaran en el Co_Latino y desde ahí empieza la crisis y en este momento se ha vuelto insostenible a tal punto de quedarse únicamente con la versión digital y han puesto a la venta la infraestructura, para el pago de los pasivos.
Además de todas las actividades a las que te dedicas, nos faltó decir que eres tuitero, hagamos lectura de uno de tus tuits
“La institucionalidad democrática no se trastoca al remover un funcionario (así como parece que no se trastocó cuando se le nombró a pesar de ser claramente militante de un partido), se trastocó cuando a plena luz del día nos robaron la luz, las pensiones, las telecomunicaciones”.
¿Te recordás a quién se lo dirigías?
Cuando se da la destitución de los magistrados de la Sala (de lo Constitucional) y del fiscal, lo cual me pareció a mí una acción políticamente correcta y comprensible, la extrema derecha y la extrema izquierda en este país empezaron a darse golpes de pecho, afirmando que con esas destituciones se estaba trastocando la institucionalidad democrática. Yo que tengo una concepción de la democracia que vas allá de las palabras, la institucionalidad no se toca porque se ponga o quite un funcionario, esa es la parte meramente formal, la institucionalidad democrática es decir la razón de ser de la democracia en este país se supone es la población; y esa institucionalidad fue trastocada y vilipendiada, cuando a plena luz del día se da en El Salvador la segunda expropiación más grande en la historia del país; la primera había sido cuando nos expropiaron las tierras comunales y los ejidos; y la segunda, cuando en la década de los noventa nos expropiaron del único espacio que nos quedaba, apenas quedaba una seña que éramos ciudadanos, porque éramos súbditos; entonces vienen y nos quitan la energía eléctrica, las telecomunicaciones, las pensiones, se dolariza el país, se privatizan los ingenios de azúcar, etc. Ahí fue donde se rompió para mí la institucionalidad democrática del país y ahí nadie puso el grito en el cielo; que se diga que la institucionalidad está amenazada porque se quitan los magistrados y al fiscal esa es una posición hipócrita. En los últimos dos años lo que estuvimos viendo en El Salvador cuando el presidente Bukele asume el cargo, fue una guerra de posiciones y eso era una nueva lógica de política representada por Nuevas Ideas y por el otro lado tenemos la política tradicional un bipartidismo de facto y feroz, ahí empieza esa guerra de posiciones y la última trinchera que le quedaba al bipartidismo era la Asamblea legislativa y por eso fue que ellos la defendieron de la forma que la defendieron y la perdieron.
Las oposiciones también buscan el bien de una nación porque quieren que el país mejore, pero aquí no es el caso.
Es que desde hace más de dos años no ha habido una oposición o al menos una oposición medianamente lúcida, lo que ha habido es una defensa visceral de la política perversa en este país. Obviamente, en otros países estamos hablando de oposiciones en las cuales encontrás en ellos puntos de vista que te permiten fortalecer un planteamiento pero ahí partís de la premisa que tanto la oposición como quien está en el gobierno tiene como referente principal el bienestar de la población, pero en este caso nos estamos enfrentando llamémosle “oposición” por usar un término, pero en realidad era una defensa visceral de intereses particulares e intereses corporativos que lejos de abonar al bienestar de la población, lo que han venido haciendo es deteriorando y no lo veamos en términos de estos últimos años, sino que esos que hoy son oposición cuando estuvieron en el gobierno no impulsaron todas aquellas medidas que la población hubiese considerado medianamente positivas para ellos y al no hacerlo la gente va depurando su cultura política.
La gente comenzó a depurar a los políticos y a esto sumemos a los medios de comunicación, por esto la respuesta del nuevo medio periodístico que presenta el Estado salvadoreño y esto se replicó en áreas sociales.
Ahí estábamos frente a una depuración de la cultura política, democrática de la población, la gente llega a comprender al final, que la utopía social que nosotros llamamos “construir un nuevo país” y que algunos lo llaman ahora “hacer historia”, la gente se da cuenta que esa utopía no está hecha de palabras o promesas, está hecha de proyectos concretos y estos en beneficio de la población nunca existieron.
Esta depuración de la cultura política democrática del salvadoreño se logra conjuntar también con una decadencia intelectual ideológica política y electoral del bipartidismo de facto. El Salvador en estos últimos años tiene como para escribir una primicia de teoría política, se conjuga con el liderazgo de Nayib Bukele que en términos sociológicos se define como una singularidad sociológica y esto significa que de repente surge un factor detonante en la realidad que te permite la oportunidad de construir una lógica distinta, pero también podría convertirse en una decepción como las otras sino se aprovecha, lo que se define en términos sociológicos encontramos en Bukele el liderazgo carismático y el liderazgo burocrático; en el sentido que él, es jefe de estado pero también es el líder carismático, cuando eso se junta en una población se da la coyuntura para cambiar el rumbo de un país, estamos hablando de una refundación del país, depende en este caso de los órganos del gobierno para impulsar un nuevo proyecto y también depende del apoyo de la población.
La gente cayó en la decepción, en el desencanto en la desilusión porque se da cuenta que al final, que la lógica política sigue siendo perversa, que en la gobernabilidad de este país sigue siendo la corrupción y la impunidad y ¿Cuándo se tendría que haber combatido esto? se tendría que haber empezado a combatir desde los noventa y esto es una de los costos políticos más grandes del FMLN.
Tú crees que el país necesitaba ponerle fin al bipartidismo.
Necesitaba ponerle fin desde hace ratos, yo creo que con las elecciones presidenciales y con estas últimas elecciones, los salvadoreños tenemos la oportunidad de entrar al siglo veintiuno, o sea nosotros estamos entrando a este siglo dos décadas más tarde, porque recién ahora podemos pasar de ser los súbditos electorales que éramos a ser los ciudadanos electorales, cuando se discute por ejemplo la división de poderes que a mí me parece una falacia, la división de poderes si se revisa la Constitución de la República cuenta que fue concebida más que estar pensando en una división de poderes, estaban pensando en una división entre partidos políticos, pero el poder real y la división de poderes está en segundo plano; porque el poder real de este país es el pueblo y hasta ahora lo estamos viendo.
Entonces si el pueblo decide que quiere esto, ¿quiénes son los partidos políticos para cuestionar esa decisión o quiénes son otros para hablar de esta decisión? Por eso hablaba yo del trastocamiento que eran golpes de pecho falsos, eso de decir que se había roto la institucionalidad democrática; cuando se eligió al fiscal hubo recursos de inconstitucionalidad en la elección de él y ahí por lo menos la que era, la sala de lo constitucional que son los caballeros templarios del capital, tendrían que haber dicho que no se tenía que asumir el cargo como hicieron con un candidato a diputado. Te lo voy a decir en términos de fútbol, lo que el árbitro cobra es la primera falta y la primera falta fue elegir de forma ilegal e inconstitucional al fiscal, bueno incluso con los magistrados de la sala hubo esas discusiones porque había muchas irregularidades al respecto de su elección. Como ciudadanos hemos tenido la oportunidad y eso es una fortaleza de la lógica política, pero también es una fortaleza que debe tener muy en cuenta el gobierno, debe saber que esa enorme población que masivamente te da su simpatía para que construyan el país con el que tanto hemos soñado, esa misma gente también sino se hacen las cosas bien, van a depurar.
Estamos viendo un cambio ahora, el pueblo hizo uso de la democracia.
Realmente a quien te debes, el poder real de este país o quien debes de considerar tu mejor y peor contrapeso al mismo tiempo es el pueblo, no son los llamados tres poderes del Estado, que están divididos porque tienen funciones distintas, esta la teoría de la división de poderes de John Locke y Montesquieu, que en otros países han sabido pasar de la división a la fusión de poderes. Entonces lo que se necesita es amparar todo un proyecto de nación que tenga como referente al soberano que es el pueblo, porque necesitas el apoyo de todas las instancias posibles. El poder real y el contrapeso real en este país no hay que perderlo de vista nunca es el pueblo.
¿Cómo ves el futuro de ARENA y FMLN ante esta situación que es una realidad nacional y que metieron poquitos diputados por residuos en la Asamblea?
Yo creo que tanto ARENA y el FMLN han comprendido en carne propia, lo que significa la palabra “irrelevante” y van a ser irrelevantes no solo en este momento sino lo seguirán siendo, acá la población salvadoreña es una constante muestra histórica en el país; si la gente te echa del tinglado político jamás les devolverá el favor en otras palabras, jamás devolverán su simpatía; ahí tenemos al PDC que en los años ochenta fue una maquinaria legislativa. ¿En qué se convierte al final? en un partido irrelevante o en partidos que el único interés que tienen es conseguir dos que tres diputados. En el caso de la derecha, la estrategia de ellos electoralmente ha sido para mantener el poder crear varios partidos satélites que halarán votos de lo que ellos consideraban la oposición, pero al final siguen siendo derecha; en este caso si nosotros vemos Nuestro Tiempo y VAMOS, es parte de la derecha misma solo que con otro nombre, y por esto llegas a eso que a mí me parece una aberración jurídica. los residuos en donde hay diputados que son porque tienen todos los votos necesarios y otros que son medio diputados o un tercio de diputados por los residuos. Porque no son diputados puros en el sentido del cociente electoral.
¿Tú crees que la ley del residuo debería seguir vigente en el país?
Yo creo que debería reformularse, porque es una paradoja de la democracia, que se tengan unos diputados con una cantidad de votos y otros con menos; debería pensarse en alguna fórmula para que fuera equitativo el nombramiento de los diputados, pero por el otro lado debería pensarse también en las elecciones de segundo grado. Debe de revisarse porque al menos como lo estaban manejando antes, nosotros tenemos acá funcionarios que no son electos por el pueblo directamente, hasta antes de este cambio electoral reciente, la sala de lo constitucional más allá de ella ni Dios llegaba, porque si la sala decía esta casa es negra era negra. Hemos tenido el poder más grande de este país concentrado en tipos que ni siquiera eran elegidos por la población, llegamos a un punto que la sala reformo la Constitución sin tener la facultad de hacerlo por el hecho de permitir que diputados independientes participen, fue una reforma de facto de la Constitución porque ahí dice que la única forma de acceder a un cargo dentro del Gobierno es a través de los partidos políticos.
¿Cómo crees que se encuentran los salvadoreños en términos psicológicos tras la pandemia?
Yo creo que psicológicamente no podemos decir que estamos bien del todo, hay una serie de cosas que creo que debemos recuperar, una de ellas es que la cotidianidad basada en el contacto cara a cara con la gente que no debemos permitir que sea convertido en algo artificial como lo pretende el capitalismo digital, el contacto cara a cara que es lo que tanto le hace falta a la población, es lo que te permite construir solidaridad, conciencia. Lo otro en términos psicológicos y lo reconozca o no la oposición es el manejo de la pandemia nos tiene a nosotros en una situación muy distinta a la de incluso países hermanos, realmente nosotros no vivimos la parte más patética de la pandemia y lo otro es que realmente los salvadoreños somos un pueblo luchador, aguantador; nosotros como pueblo hemos aguantado dictaduras, represiones, años infames por los políticos y la gente aprende a hacerse dura y tierna con estas situaciones, en el caso de la pandemia ahí se combinaron las dos cosas porque se combina la parte del confinamiento que te permite reencontrarte como familia pero también repensar sobre todo con la actuación que estaban teniendo los políticos con poner en riesgo la vida de la población, repensar la lógica política para reafirmarla en las elecciones de febrero. Fue un momento de reflexión en la cual los salvadoreños nos damos cuenta que tenemos la posibilidad de hacer algo diferente. Los nuevos funcionarios tienen dos alternativas una es ser un político más, pero la otra alternativa que tienen es ser más que un político y un protagonista en la refundación de este país.
*Colaboración de Raquel García
Por la experiencia vivida en nuestro país, lo que no quisiéramos es que estos nuevos magistrados se hagan del ojo pacho con las injusticias que cometan sus nuevos electores. Como lo hicieron los magistrados anteriores.
Quiérase o no, tanto los nuevos magistrados como el nuevo fiscal, son personas afines al nuevo gobierno, y ya se comenta que este nuevo fiscal va dejar pasar los actos inadecuados que algunos ministros y exministros del atcual gobierno han cometido.
Nadie hizo nada y nadie lo supo, el libro de los partidos tradicionales fue escrito por manos perversas carentes de conciencia social y con una individualidad escrita en letras de oro.
HABÍA UNA VEZ UN PEQUEÑO PAÍS BANANERO…1) cuyos políticos gozaban d impunidad y corrupción, pero q tenían la bendición d un país «amigo» 2) Un día el pueblo maduró políticamente y dejó las bananas 3) «EL AMIGO» DICE Q DEBEN SEGUIR CON BANANAS VAÁ!
Edgardo Nolasco, digale a su Rodolfo Parker, que salga con sus CACEROLAS a la calle, y a su sanguinario y corrupto partido ARENA, gritando patria SI comunisno NO. Tamnien digale, al FMLN, que se tomen las calles con cinco o doce personas.
Muy bien Rene. Este pueblo tiene que valorar, quienes son los verdaderos analistas y tiene que decir NO MAS YEGUAS relinchadoras que se hacen pasar como analista y es el caso de zamorita, unos tales Fortin, Ulises, Carlos Araujo, los Samoyoas,Ronal.
MUY SOCIÓLOGO SERÁ ESTE SEÑOR, PERO SE LE OLVIDA QUE LA DESTITUCIÓN DE LOS MAGISTRADOS FUE FRAUDULENTA. AUNQUE FUERAN LADRONES, LA LEY MANDA QUE SE DEBEN DEMOSTRAR LAS CAUSAS ESPECÍFICAS DE LA DESTITUCIÓN Y NO POR VENGANZAS O RESENTIMIENTOS DEL PRESI
Y en su perversion tanto Arena como fmln se volvieron aliados, defendiendo la vivianada, la corrupcion y la Mediocridad cuando NO la Inutilidad e Incompetencia. Se olvidaron del Pueblo y actuaron con Arrogancia creyendose insustituibles! Vaya Lacras!