La policía está tras la pista del asesino o asesinos del ingeniero en sistemas, Mario Josué Rodríguez Menjivar, un joven empresario de 26 años, originario de Sensuntepeque, Cabañas, quien fuera asesinado después de haber departido con amigos en una discoteca el pasado domingo por la noche. Su cuerpo apareció el lunes 23 de julio, y presentaba 3 impactos de bala.
La policía indaga las cámaras de vigilancia en el trayecto de la avenida Masferrer Norte y calle El Roble, de esta capital, en búsqueda de pistas que puedan llevar a la captura de los responsables.
Hasta ahora lo que se sabe es que Mario estuvo consumiendo alcohol con amigos en una discoteca de San Salvador y que al salir se dirigió a su residencia en esta capital y chocó su auto, un Honda Fit, a la altura de la calle El Roble, de la colonia Escalón, al norponiente de la capital.
Los investigadores creen que en el trayecto pudo haber discutido con el conductor de otro vehículo y que ese haya sido el detonante del asesinato, aunque no descartan cualquier otro motivo. El auto de Mario estaba chocado y su cuerpo quedó al timón.
Cuando la policía llegó a la escena, no encontraron el teléfono celular del joven ni sus pertenencias, excepto el DUI. Al interior del auto encontraron al menos un envase de cerveza vacío.
El cuerpo del joven fue despedido este martes en Sensuntepeque, donde era muy apreciado. Sus amigos lamentaron la tragedia y señalaron que Mario no era una persona violenta y no se metía en problemas, por lo que les extraña la manera en que murió.
También destacaron que era aficionado a los autos y que poseía algunos trofeos luego de ganar algunas competencias en pista. En la página especializada de Facebook “Todo Motor”, sus administradores le rindieron un último adiós.
