El ministro de Trabajo, Rolando Castro, denunció una vez más a la alcaldía de San Salvador por seguir botando la basura a cielo abierto, en la planta de Aragón, al sur de la capital, pese a la resolución judicial que ordena a la administración del alcalde Ernesto Muyshondt abstenerse de hacerlo debido a la alta contaminación que genera en la zona.
«No entiendo como se permite utilizar la Planta Aragón como un basurero a cielo abierto, los vecinos del lugar me escriben que necesitan apoyo de las autoridades. ¿Dónde se encuentra el Juzgado Ambiental de San Salvador? ¿No hay autoridad competente? Esto es un delito ambiental», hizo ver el funcionario.
Agregó que el problema se agrava debido a que la zona donde funciona la planta es muy habitada y ahí se encuentran personas de la tercera edad, niños y personas vulnerables «que reciben los impactos del gas metano» que son dañinos a la salud.
Castro mostró las fotos hechas ayer, en las que se observan los camiones de la alcaldía capitalina depositando los desechos en la Planta de Transferencia. El sitio no tiene los permisos de ley para procesar la basura.
El ministro hizo un llamado al Juzgado Ambiental de San Salvador para que paren el daño ambiental que se estaría generando por no procesar miles de toneladas diarias de basura.
Los basureros a cielo abierto están clausurados por decreto.
La municipalidad lanza la basura a cielo abierto debido a que MIDES le cerró las puertas por una deuda de casi $5 millones. El caso está siendo tratado entre abogados municipales y de la empresa encargada del tratamiento de la basura.
Representantes de las comunidades aledañas a la Planta de Transferencia Aragón colocaron otro aviso ante la FGR la semana pasada, por estos actos del alcalde de San Salvador.