El exsecretario privado de la Presidencia de la gestión del expresidente Mauricio Funes (2009-2014), Francisco Cáceres, se entregó ayer ante el Juzgado Séptimo de Instrucción por una serie de delitos por los que se encuentra acusado.
Cáceres poseía una orden de captura desde junio del año pasado y se encontraba prófugo de la justicia. La Fiscalía lo acusa de peculado y lavado de dinero por $1,567,659.
Horas más tarde de su entrega, se informó que Francisco Cáceres se le decretó arresto domiciliar tras una coordinación entre el Juzgado y la Fiscalía General de la República (FGR).
Hasta el momento la FGR no ha querido revelar la razón por la cual se le otorgó este beneficio a Cáceres.
Por su parte, el presidente de la República, Nayib Bukele, reaccionó anoche ante este caso diciendo que la captura de Cáceres será de utilidad para acusar a Funes sobre actos de corrupción. «(La captura) nos dará información sobre diferentes casos relacionados con el prófugo Funes y podremos saber más sobre su corrupción», dijo.
La Fiscalía afirma que el exfuncionario realizó múltiples depósitos y pagos en ocho bancos donde tenía tres cuentas de ahorro, 11 cuentas corrientes, 4 depósitos a plazo, 18 préstamos y 6 tarjetas de crédito.
El Ministerio Público aseguró que el incremento patrimonial que se le encontró no tiene una fuente lícita y que utilizó para beneficio propio y de terceros, los fondos públicos.
El exsecretario privado devengaba un salario mensual de $ 2,652.
Con las disculpas del caso pero los abogados son la profesión más corrupta. En todo caso de corrupción hay un abogado. La justicia debe ser igual para todos. Va a la carcel el que roba na gallina y el que roba millones a su casa. Jajaja