Por: Guillermo Serrano
“La migración es un fenómeno que supone beneficios tanto para quienes salen de su país de origen como para aquellos que los reciben. En la jornada mundial dedicada a esas personas, la ONU llama a seguir la ruta del pacto para una migración regular y ordenada.
“La migración es un poderoso motor del crecimiento económico, el dinamismo y la comprensión. Permite que millones de personas busquen nuevas oportunidades, lo que beneficia por igual a las comunidades de origen y de destino”, aseveró este martes el Secretario General de la ONU”.
¿Quién y qué es un inmigrante? ¿Por qué la inmigración está en las noticias de todos los días? Vivimos en tiempos que nos ponen en frente de nuestros propios prejuicios hoy en día. Oímos hablar de extranjeros, inmigrantes y casi siempre los asociamos con personas o familias distintas en su aspecto, con idiomas extraños e incomprensibles, con costumbres diferentes. Vestimentas, comidas, fiestas y celebraciones que “no calzan” con nuestra manera de vivir…
Recientemente hemos sido testigos de las “caravanas” de viajeros (¿podemos llamarles inmigrantes?) que se han encaminado a la frontera entre Estados Unidos y México con la ingenua idea que el país de más al norte les abriría sus fronteras para darles una bienvenida a su país y a su sistema de vida.
Los testimonios (sí, ingenuos) de algunos de eso viajeros hablan de un desconocimiento completo de las políticas de los países y de sus sistemas de inmigración. Hablan algunas madres (y algunos padres, los menos) de “una vida mejor”, de “seguridad” y hasta de colaborar en la construcción del sueño americano.
Pero nada más llegar al borde de esos dos países, el sueño se ha convertido en pesadilla, para familias, entre las que hay que contar a los niños, inocentes testigos de decisiones mal pensadas y menos planeadas.
Dice Elsa Mazón, Ejecutiva de la Cadena de Radio Moody, de Chicago, citando el libro de Levítico 19:33 que dice textualmente “No hagan sufrir al extranjero que viva entre ustedes.”
“En el libro de Levítico, Dios le enseña al pueblo de Israel que la santidad requiere no actuar como los demás pueblos paganos en cada una de las áreas de su vida.
Asimismo, como los israelitas fueron extranjeros en Egipto y experimentaron el significado de la opresión y el vivir en tierra ajena, Dios les recuerda que ellos a cambio deben de tratar al extranjero en su comunidad como si se tratara de sí mismos.
Este mandato de no maltratar al extranjero apunta hacia la enseñanza de Jesús en la parábola del Buen Samaritano en el Evangelio de San Lucas. Aquí, Jesucristo instruye que no solo no hay que maltratar al extranjero, sino que incluso hay que ser compasivo y misericordioso hacia el prójimo desfavorecido por la vida. Cuando Jesús viene, nos obliga a ver la necesidad en el débil, en el pobre, en el necesitado como algo que no puede ser ignorado”.
En el Día del Emigrante, nosotros en Ministerio Reforma nos hacemos eco de la declaración y buen deseo de las Naciones Unidas de mirar al extranjero como una fuente de buena inversión que ayuda en la prosperidad del país que los recibe. Pero también como cristianos debemos recalcar las palabras del libro de Levítico: “No hagan sufrir al extranjero que viva entre ustedes.”
Qué poderosa es la Palabra de Dios, dicha por él mismo a través de sus profetas bíblicos!
Qué óptima y vigente reflexión del Rev. Guillermo. Que Dios nos ayude a ser más tolerantes y tener verdadero sentimiento de amor a los que sufren.
ADEMAS TODOS ESOS CABRO DE APELLIDO NES, ACASO NO SON TAMBIEN INMIGRANTES ELLOS TAMBIE, VINIERON DE TODO EUROPA A HUEVIARSE TODO LO QUE SE LES PUSO ENFRENTE Y HASTA LE LLEVAVAN A DONA VIEJA, Y SE LLENARON LAS BOLSAS DE ORO,ETC. NOMAMEN CULS.