Tras la audiencia preliminar celebrada este miércoles contra José Miguel Menéndez Avelar, conocido como ‘Mecafé’, el Juzgado Tercero de Instrucción de San Salvador decretó apertura a juicio contra el imputado, quien es acusado junto al expresidente de la República, Mauricio Funes y el representante legal de la empresa guatemalteca, Jaime Ramón Aparicio Mejía, quien está preso en Guatemala por otro caso similar de soborno. Los tres son acusados por casos de lavado de dinero y cohecho.
Uno de los casos por los que son procesados es por la regalía de una avioneta de parte del empresario guatemalteco a ‘Mecafé’ y al expresidente Funes a cambio de la adjudicación de construcción del puente San Isidro en Chalatenango.
El proyecto fue adjudicado el 10 de octubre del año 2013 y fue ejecutado sobre el Río Lempa y que conecta los municipios de San Pablo Tacachico, La Libertad y Nueva Concepción, Chalatenango.
En la audiencia preliminar, los fiscales ofrecieron la pericia que señala las supuestas irregularidades en la adjudicación del proyecto que tenía un costo de $8,487,716,94.
Además, la jueza Tercero de Instrucción decidió mantener la medida de detención provisional a ‘Mecafé’ mientras continúa el proceso en su contra.
La defensa había pedido que se modificara el delito de casos especiales de lavado de dinero por el de tráfico de influencias, pero la jueza no accedió.
Las familias Menéndez y Avelar se establecieron en Quezaltepeque. Eran gentes honorables dedicadas a la agricultura y la crianza de ganado en sus haciendas aledañas a la ciudad. Don Rosendo Menéndez y don Marciano Avelar se emparentaron
y sus hijos e hijas asistían a las escuelas y fueron compañer(o)as de muchos de quienes aún vivimos. Muchachos decentes como Manuelito Avelar y Miguelito Menéndez (padre de MECAFE). Todavía existen descendientes de ellos en la ciudad y en San Salvado