La ministra de Relaciones Exteriores, Sandra Jovel, informó que después de una reunión con el cuerpo diplomático la noche del miércoles se enviaron las instrucciones a la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) para que permitan el ingreso de ayuda internacional.
El miércoles causó indignación en la opinión pública la denuncia del sacerdote salvadoreño Edwin Baños, quien traía 15 toneladas de ayuda en cuatro camiones para los damnificados por la erupción del Volcán de Fuego, pero fue retenido por más de 12 horas en la frontera La Ermita y no le fue permitido ingresar la ayuda porque el Gobierno no había enviado la autorización.
En una entrevista con Emisoras Unidas, Jovel dijo que se enteró del incidente hasta eso de las 18 horas del miércoles. En ese momento, cuando se reunió con embajadores, les explicó la forma en que se iba a recibir la cooperación internacional y que la primera etapa de la emergencia estuvo a cargo de la Conred.
“Agradecemos todas las donaciones que han venido, pero sí necesitamos tener un trámite correspondiente”, apuntó Jovel.
Baños, quien estaba simultáneamente en la entrevista, había declarado que le bastaba una comunicación de un canal oficial del Gobierno de Guatemala para que le dieran instrucciones sobre qué hacer para entregar la donación.
“No sé francamente si él se comunicaría con alguien del Gobierno. De hecho, ayer en la noche estuve solicitando su número de teléfono para poder yo misma comunicarme con él, y hoy en la mañana le pedí al embajador de El Salvador que me buscara su número para poder comunicarme y para poder hacer los trámites respectivos”, aseguró Jovel.
Baños dijo que se “sentía mal” cuando le pedían disculpas o con el agradecimiento de las personas, porque era algo natural del ser humano el ayudar y que en este caso lo hacía la iglesia católica, la iglesia evangélica y algunas fundaciones.
“Ayer inmediatamente se comunicó conmigo un pastor evangélico y luego están también fundaciones y centros de acopio. Somos nosotros quienes nos hemos topado por primera vez con ese inconveniente y quiero decirle algo: Si la cabina de radio encontró mi número, si el pastor evangélico encontró mi número y me contactó desde Guatemala, con todo respeto, me suena raro que una instancia de gobierno que tiene acceso a la mayor información no haya encontrado mi número”, criticó Baños.
El sacerdote defendió la generosidad de las personas que responden con ayuda a los damnificados, haciendo énfasis en que la necesidad va a ser mayor, que pueden convocar a donaciones para construirles un hogar “aunque sea pequeño pero digno”.
“Cuando se trata de ayudar hay tantos corazones, y un gobierno no tiene que ser obstáculo en ningún momento, y creo que como Iglesia católica somos tan respetuosos con las leyes, que no se imaginan el trabajo previo a las 12 horas de espera, para seleccionar todo y llevarlo”, reiteró Baños.
Sobre lo dicho por el sacerdote, la canciller se excusó por los inconvenientes: “Lamento mucho que los medios de comunicación se pudieron comunicar antes con usted, pero bueno, no vamos a llorar sobre la leche derramada”, aseveró Jovel.
Juan Campos, hablas como si ya fuiste a revisar esa «BASURA» a la feria.
Si no ayudas al prójimo mejor no hables.
Como esa vieja duerme en cuna de oro, LA IGUAL QYE TODAS LAS RATTAS POLITICAS DE GUATEMALA, no le importa que el pobre reciba ayuda.
Limosmera y con garrote, disque canciller la fulana.
Tarada e insensible!